Tomás Gómez
Las restricciones impuestas por la pandemia siguen cambiando algunas tradiciones y la misa solemne del 2 de agosto no será la excepción.
La celebración, en la que se reunen el clero nacional con el Gobierno de la República cada año y cuya liturgia suele tener un alto contenido político este año no contará con la representación del Poder Ejecutivo.
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Casa Presidencial confirmó este viernes que desde el 9 de julio la Diócesis de Cartago envió una carta comunicando que por las restricciones del COVID-19 ningún jerarca de los Supremos Poderes estará invitado a la ceremonia.
El mensaje fue contestado por el presidente Carlos Alvarado en un oficio indicando que “es un verdadero acto de patriotismo el llamado que hacen a los y las fieles para que acaten las directrices emitidas por el Ministerio de Salud, en atención a la pandemia ocasionada por el COVID-19”.
El contexto de la pandemia provocó la cancelación de todas las actividades públicas relacionadas con la Vírgen de los Ángeles, incluyendo la Romería y la Pasada.
Los rosarios y las misas, por su parte, se celebran a puerta cerrada y así se hará el domingo, cuando la eucaristía tradicional se realizará a las 10:30 de la mañana y se transmitirá por las redes sociales.
