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Joven que denunció a sacerdote por abuso: “¡lo logramos! Se sigue haciendo justicia”

Luego de la detención del exsacerdote Mauricio Víquez en México este domingo, los jóvenes quienes denunciaron los abusos celebraron un…

Por Manuel Sancho

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Joven que denunció a sacerdote por abuso: “¡lo logramos! Se sigue haciendo justicia”
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Luego de la detención del exsacerdote Mauricio Víquez en México este domingo, los jóvenes quienes denunciaron los abusos celebraron un avance en el proceso judicial que se sigue en contra del religioso.

Anthony Venegas, uno de los afectados por Víquez, destacó el desenlace, que se conoció este domingo por la noche. “Se capturó a nuestro abusador”, escribió en su cuenta en Twitter. “NO MÁS OBISPOS ENCUBRIDORES”, añadió, en referencia a varios jerarcas de la Iglesia Católica en Costa Rica, que nunca castigaron a Víquez, aunque conocían las denuncias desde hace más de 15 años.

Autoridades policiales de México detuvieron este domingo en la madrugada a Víquez, acusado de varios delitos sexuales. Rodolfo Alvarado, abogado de los jóvenes señaló a El Observador que a partir de este lunes se realizaría el proceso de extradición, tomando en cuenta la documentación que manda el Ministerio Público, sobre los delitos por los que se le persigue en nuestro país.

La Policía Internacional ya apoyaba la pesquisa, pues el hombre acusado de violación tenía orden de captura internacional.

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Aunque conoció denuncias y no actuó, Iglesia ahora apoya proceso

Mediante un comunicado de prensa el domingo por la noche, la Arquidiócesis de San José manifestó que Víquez “tiene que responder ante la instancia correspondiente”. Además la Curia defendió que nunca tuvo contacto con el expresbítero.

“La Curia se vuelve a poner a la disposición de las autoridades civiles para lo que requieren”, anotó la Iglesia.

Mauricio Víquez Lizano fue una figura de peso en la Iglesia Católica costarricense, siendo incluso cara protagonista y vocero defensor de las posturas de la entidad en temas como aborto y matrimonio igualitario.

Desde el 2003, Venegas interpuso una queja ante la Iglesia y pidió que se llevara la denuncia a los juzgados. Pero la institución religiosa solamente lo apartó como párroco. José Rafael Quirós, arzobispo de San José, defendió que debía realizarse el proceso canónico de la Iglesia, antes de tomar medidas. Ángel San Casimiro, exobispo de Alajuela, también dijo que “no se trataba de crucificar” a Víquez.

Víquez, de 55 años, es acusado en nueve procesos judiciales por delitos sexuales. Aunque la Iglesia conoció las denuncias de las presuntas víctimas desde el 2003 y nuevamente en el 2016, no hizo nada, sino hasta julio del 2018 cuando lo suspendió.

Michael Rodríguez, de 38 años, y Anthony Venegas, de 33, viajaron a México el 12 de agosto, en busca de apoyo para localizar al exsacerdote, a quien acusan de abusar de ellos y otros adolescentes cuando eran monaguillos.

Víquez abandonó Costa Rica en enero pasado y los registros migratorios indican que ingresó a México, aunque sus acusadores desconocen su paradero dentro de ese país. En febrero pasado, el Vaticano expulsó a Víquez del clero, tras acumular nueve denuncias de abuso sexual. Rodríguez y Venegas aseguran que el número de sus posibles víctimas es mucho mayor.

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