Avenida O

La agricultura regenerativa (2da parte)

Doctora Plantas para El Observador En esta segunda parte sobre este tema, le explicaremos los pasos para que pueda planificar…

Por Desde la Columna

Tiempo de Lectura: 3 minutos
La agricultura regenerativa (2da parte)
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Doctora Plantas para El Observador

En esta segunda parte sobre este tema, le explicaremos los pasos para que pueda planificar y llevar al campo su huerta regenerativa y con esto ser parte de la agricultura consciente que busca mejorar las condiciones ambientales.

¿Cómo se empieza?

  1. Luego de seleccionar el sitio y planificar el diseño, será necesario tener a la mano materiales como pico, pala y azadón. También necesita compost, ya que se utilizará como enmienda para mejorar la tierra una vez armadas las camas para siembra.
  2. El siguiente paso será remover las hierbas y descompactar el suelo. Eliminar todas las hierbas dentro del área a cultivar, pero el secreto será conservarlas ya que luego de 3 o 4 días ya estarán secas y se podrán utilizar como cubierta vegetal como una estrategia para ahorrar recursos.
  3. ¡Ahora viene el trabajo duro! Descompactar el suelo con pico y azadón, exactamente ese trabajo que solo disfrutan los que realmente se han decidido a cosechar su comida en unas semanas. 30 cm de profundidad serán suficiente. La importancia de este paso para las raíces es facilitar la absorción de los nutrientes, y que la planta no gaste energía en profundizar sino en crecer.
  4. Una vez que el suelo este suelto, será el momento de agregar el compost, siendo una forma de incorporar carbono al suelo. El compost es básicamente materia orgánica descompuesta así que al revolver unos 10 kg por metro cuadrado se logra incorporar las enmiendas necesarias al suelo para que las plantas se desarrollen perfectamente.

OBSERVE MÁS: La agricultura regenerativa (1ra parte)

Principio básico: plantas sanas tienen la capacidad de defenderse solas.

Cobertura, siembra y riego

  1. Ya que tenemos el suelo en las mejores condiciones, y marcadas las camas, se debe aplanar la cama y proteger los bordes con piedras, este paso previene la erosión y delimita el sitio, para que no haya pisoteo sobre el área de cultivo y así evitar la compactación.
  2. Para evitar enfermedades y minimizar plagas es necesario desinfectar el suelo, eliminar los patógenos y aplicar soluciones de microorganismos. Se puede lograr con el proceso de solarización, dejando las camas expuestas durante tres días elevando la temperatura de la cama con plástico.
  3. Será el momento de cubrir con la cobertura vegetal las camas: las hierbas secas, granza de arroz, o paca de heno, funcionan para suprimir las malezas que puedan crecer; evitar la evaporación del agua; y mantener un ambiente de humedad para que los microorganismos funcionen eficientemente. Además evita la erosión por lluvia, viento y la compactación. ¡Este paso es fundamental!
  4. Ahora llegó el momento de hablar sobre el sistema de riego. Aplicar el riego manual para estas huertas resulta bastante agotador, ya que debe realizarse todos los días. Por esta razón es recomendable un sistema de riego con mangueras pequeñas que tienen goteros cada 15 cm, que se pueden encontrar en ferreterías o tiendas de productos agronómicos. Lo mejor de este tipo de riego es que ahorra tiempo, agua y protege las plantas del impacto directo.
  5. Por fin el paso de la siembra y el secreto de la agricultura regenerativa, es asegurar la permanencia de varios cultivos con tiempo de cosechas distintas, lo que busca imitar un ecosistema diverso y resiliente, que beneficia los ciclos, la biodiversidad, y aprovecha los recursos locales. La siembra de policultivos incluye plantas aromáticas, arboles, hortalizas y hasta flores que mejoran la presencia de animales polinizadores.
  6. Para cerrar el ciclo, será necesario el mantenimiento constante. Deshierbe, riegue en las horas más frescas del día y aplique control de plagas usando productos biológicos evitando el uso de pesticidas y por supuesto el cariño diario.

Finalmente, cuando llegue el momento de cosechar, se debe realizar en horas de la mañana, para minimizar lastimar las plantas y los productos.

El paso más significativo será disfrutar la cosecha que ha nacido de todo el trabajo previo. Esa satisfacción no tiene precio, así que los invitamos a conectarse de nuevo con la tierra y ser parte de todo este movimiento de la agricultura regenerativa.

Fuente informativa: Universidad para la Cooperación internacional, 2020.