Desde la Columna
Por Dinora Ochi para El Observador
Diariamente manejamos nuestro cabello y lo sometemos a diversos cuidados, y es que el cabello, sin duda alguna, es un atributo estético importante en el ser humano. Por esta razón detallo recomendaciones de los productos y aclaro dudas de algunos mitos desde el punto de vista dermatológico:
Lavado del cabello:
El principal producto que utilizamos es el champú, se trata de un cosmético cuyo objetivo es lavar el cabello y no dañarlo; por lo tanto existen una serie de “mitos” sobre el uso del champú que es preciso aclarar:
- El champú no hace que el pelo crezca, por lo tanto no es un tratamiento de la pérdida del cabello, pero sí puede ser un coadyuvante.
- El champú no hace que el pelo caiga, a menos que haya síntomas de alergia a alguno de los componentes del champú.
- El lavado del cabello no hace que se me caiga más el cabello. Algunas personas retrasan el lavado e incluso le tienen un auténtico pánico al lavarlo. El cabello que cae al lavarlo también lo haría al peinarlo o incluso con el simple roce de la almohada; así que el cabello puede lavarse a diario si es de preferencia.
¿Cómo debe lavarse el cabello?
Es importante la técnica en que se realiza. Especialmente en personas con pelo largo se recomienda lavar en una forma suave y delicada en sentido vertical, posteriormente debe enjuagarse muy bien con abundante agua. Después del champú, y si se desea, puede aplicarse un acondicionador para mejorar humectación a la hebra del pelo.
¿Como peinar y secar mi cabello?
El cabello debe peinarse con un peine de púas anchas que ayude a desenredar, después del secado, con una maniobra delicada. Lo aconsejable es hacerlo con toalla o dejarlo secar de forma natural. Los secadores de calor son poco aconsejables, aunque a veces necesarios. Si se utilizan estos secadores de cabello, debe hacerse a temperatura baja y con una distancia no muy cercana que acabará deshidratando la hebra. En este mismo sentido el uso de “pinzas calientes” o planchas son poco recomendables. Actualmente, hay distintos materiales con que se fabrican estas planchas, unos mejores sobre otros, como las planchas de material de cerámica mejores que las de metal. También recomiendo tratar de tener el cabello seco, antes de utilizar estos artefactos electrónicos y colocarlos a la más baja temperatura posible.
Fijadores del pelo:
Los fijadores de pelo para mantener una postura determinada con lociones, geles ó ceras, no son perjudiciales para el cabello. Es un mito pensar que podrían asfixiar la raíz si se aplican en el cuero cabelludo y favorecer la pérdida de cabello. El pelo recibe su oxígeno por la circulación sanguínea a través de la “raíz” y ¡no respira! por su parte externa en la hebra del cabello.
Modificar la forma del cabello:
El rizado del cabello que puede hacerse de forma permanente creando cambios estructurales en el pelo, especialmente en los puentes de queratina, deben ser realizado por profesionales expertos, ya que en manos inadecuadas puede generar daños irreparables sobre el cabello. El alisado emplea técnicas similares, pero por el contrario, su objetivo es un cabello liso; igualmente recomendamos expertos.
Modificar su aspecto del color:
Para ello se emplean los tintes que se clasifican según su duración. Tintes temporales: solo impregnan el pelo en su cubierta externa por lo que desaparecen con el lavado, no son dañinos para el pelo. Tintes semipermanentes, aunque igual que los anteriores impregnan el pelo en su exterior, pueden penetrar en el interior del mismo, por ello resisten varios lavados. Tintes permanentes: penetran en la parte más interna del pelo y duran hasta que el pelo se sustituye, pueden dañar el cabello, en ocasiones se emplea previamente sustancias decolorantes (peróxido de oxígeno) para permitir dar un nuevo color al cabello, en todo caso debe evitarse realizar a la vez dos técnicas al aumentar la agresividad al cabello.
Dermatóloga Dra. Dinora Ochy
Clínica Santa Isabel
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