Berlioth Herrera
El Gobierno de Nicaragua protestó ante Costa Rica por la posición de condena que asumió ante la muerte del opositor nicaragüense, Eddy Antonio Montes Praslín, en una cárcel de Managua y de paso aprovechó para reprochar las muertes de líderes ticos indígenas, sociales y ambientales.
“El Gobierno de Nicaragua expresa su más enérgico rechazo a las afirmaciones infundadas e injerencistas del Gobierno de Costa Rica, a la vez que solicita reciprocidad en la no injerencia de sus asuntos internos, especialmente cuando en la República de Costa Rica los líderes indígenas sociales y ambientales sufren constantes y sistemáticos atropellos a sus derechos humanos, incluyendo la pérdida de vidas”, dice la nota fechada 19 de mayo.
Inmediatamente agrega: “como son los casos del líder indígena Sergio Rojas, asesinado el pasado 19 de marzo de 2019, Diego Armando Saborío asesinado en 2014, Jairo Mora Sandoval asesinado en 2013, Antonio Zúñiga, Gerardo Quirós, Jorge Aguilar, Oscar Fallas Baldí y la ecologista canadiense, Kimberly Blackwell, entre otros”.
“El Gobierno de la República de Nicaragua espera que las relaciones entre los Gobiernos de Nicaragua y Costa Rica se fundamenten en el respeto a la soberanía de los Estados y no injerencia en los asuntos internos”, agrega la misiva oficial suscrita por el Ministerio de Relaciones Exteriores del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional.
La protesta del Gobierno de Nicaragua se originó por un comunicado que el el Gobierno de Costa Rica emitió el viernes anterior condenando la muerte Eddy Antonio Montes Praslín, a quién un agente policial le disparó mientras permanecía en una prisión de Managua.
“La muerte de un ciudadano, preso por participar en las protestas antigubernamentales para exigir democracia y libertades, es parte de las sistemáticas violaciones a los derechos humanos cometidas contra el pueblo nicaragüense”, dice el comunicado que está en el sitio web oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Costa Rica.
Asimismo, en el comunicado la Cancillería aboga nuevamente por la periodista nicaragüense-costarricense, Lucía Pineda que está recluida en una cárcel desde el 21 de diciembre pasado.
“Para Costa Rica es motivo de honda preocupación la seguridad y las condiciones de reclusión de la señora Pineda, y responsabiliza al régimen de Nicaragua por la seguridad e integridad personal de la comunicadora, quien ha rechazado los cargos y manifestado que solo ha cumplido con su deber de informar.
“El Gobierno de Costa Rica, una vez más, solicita la liberación de la periodista Lucía Pineda Ubau y de otros presos políticos en Nicaragua”, reza el texto que motivó la protesta del Gobierno nicaragüense
