Paula Umaña
Una innovadora metodología permitirá por primera vez la delimitación – de forma digital – de las áreas de protección de ríos, quebradas y arroyos en el país. El sistema mejorará la gestión del territorio y la conservación del recurso hídrico.
El Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) desarrollaron la metodología.
Gracias a la herramienta se podrá delimitar las áreas de protección reguladas en la Ley Forestal de 1996, echando mano de la información georreferenciada digital producida por el Instituto Geográfico Nacional (ING) y el Registro Nacional.
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Múltiples ventajas
Según el presidente ejecutivo del INVU, Tomás Martínez, la nueva metodología permitirá conocer de forma estandarizada, hasta dónde llega el área de protección de un cuerpo de agua.
Antes de la herramienta, las metodologías utilizadas para medir las zonas de protección quedaban a discreción de los topógrafos a cargo de los estudios.
El jerarca del INVU detalló algunas ventajas de la herramienta:
- Facilita la planificación e incorporación efectiva de los ríos y sus zonas protegidas en los planes de regulación municipal
- Brinda mayor seguridad jurídica al realizar inversiones públicas o privadas en terrenos colindantes con ríos
- Colabora a planificar las medidas de prevención y mitigación de riesgo ante inundaciones o deslizamientos
- Fomenta el turismo urbano
- Identifica invasiones en áreas de protección y la aplicación de políticas públicas en dichos casos
- Planifica e implementa modelos de movilidad y transporte que contemplen a los ríos como aliados
El plan piloto para la prueba de la metodología se llevó a cabo en el corredor biológico interurbano María Aguilar, a lo largo de 104 kilómetros. En ese trayecto, se determinaron 219 hectáreas de riberas que corresponden a áreas de protección, 18 de las cuales muestran posibles signos de invasión por infraestructuras.
La metodología es de uso abierto y está disponible desde este miércoles en la página web del INVU.
Aunque facilita la medición de las áreas de protección, los datos proporcionados por la herramienta no sustituyen el requisito de solicitud de alineamiento fluvial, que otorga el INVU para cada construcción, ampliación o desarrollo inmobiliario.
Según el artículo 33 de la Ley Forestal, las áreas de protección de los ríos, quebradas y arroyos se definen como la franja de:
- 10 metros a cada lado del cauce en zona urbana
- 15 metros en zona rural
- y 50 metros cuando se trata de terrenos quebrados
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Objetivos de desarrollo
Haydeé Rodríguez, viceministra de Aguas y Mares, señaló que la herramienta colabora a un cambio de perspectiva de la importancia de los ríos dentro de los asentamientos urbanos, ya que tradicionalmente la planificación urbana le ha dado la espalda a los cuerpos de agua.
Asimismo, dijo, el avance en la medición de las áreas de protección aportan al cumplimiento de dos objetivos de desarrollo: el de comunidades y ciudades sostenibles (11) y el de vida de ecosistemas terrestres (15).
Sobre esto, el representante Residente del PNUD en Costa Rica, José Vicente Troya, aseguró que la metodología ayudará a “lograr ciudades y comunidades más sostenibles, inclusivas y resilientes ante los efectos de la crisis climática”.
Por ahora, el desafío es que la nueva metodología sea replicada por las 82 municipalidades del país.
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Paula Umaña
Un viaje diario entre palabras, versiones, hechos y verdades. Una periodista en constante aprendizaje, con el sueño de ser bióloga marina y sumergirse en las historias más profundas del gigante acuático.
