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Gobierno de Ortega: “Nicaragua es el mismo ejemplo que Suecia” en la atención de la pandemia del coronavirus

Nicaragua defendió como acertada su decisión de no cerrar el país para contener la COVID-19 y acusó a la oposición…

Por Redacción El Observador

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Gobierno de Ortega: “Nicaragua es el mismo ejemplo que Suecia” en la atención de la pandemia del coronavirus
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Nicaragua defendió como acertada su decisión de no cerrar el país para contener la COVID-19 y acusó a la oposición de pretender “debilitar” al gobierno con la pandemia, según un “libro blanco” divulgado este lunes por las autoridades. El contenido del documento fue calificado de “mentira” y “falaz” por médicos y opositores.

El libro señala que “la situación de la pandemia está bajo control”, y rechazó críticas de expertos de salud y organismos internacionales por no establecer medidas de contención.

El documento fue distribuido por la Presidencia una semana después de que se hiciera el anuncio de un incremento exponencial de 25 a 279 contagios y 17 fallecidos.

Sin embargo, la ONG Observatorio Ciudadano, contabiliza 2.300 contagios, más de 400 muertos, con los hospitales colapsados.

“Critican al Gobierno por no establecer cuarentena, no hacer cierre de fronteras, no prohibir el ingreso de extranjeros al territorio nacional ni suspender el ciclo escolar en colegios y universidades del sector público, todo con el propósito de debilitar la economía”, señala el texto.

El Ejecutivo justificó que “tomar medidas drásticas de cierres tendría un efecto debilitador para la economía, aún más, podría ser catastrófico”.

“Nicaragua es el mismo ejemplo que Suecia, pero entre los países en desarrollo”, que adoptaron una alternativa al cierre total de actividades, agrega el libro.

La exministra de Salud en la década de 1980, Dora María Téllez, calificó de “ofensiva” la comparación con Suecia.

“Nicaragua está a años luz” de alcanzar los niveles de bienestar que tiene la población sueca, y de forma irónica mencionó que ‘todo el que lea ese libro blanco se va a reír’, porque el Gobierno quiere que en el exterior ‘se compre su contenido como una verdad’, apuntó Téllez.

En tanto el epidemiologo Álvaro Ramírez manifestó que “el libro blanco es un montón de mentiras organizadas, que da una falsa imagen de que el Gobierno hace algo, pero que no representa ningún beneficio, y el pueblo va ha pagar con sus muertos”.

El régimen acusa a la “oposición golpista” de una campaña masiva de desinformación para “socavar la confianza en el gobierno” y crear temor en la población con información falsa de que habrá cuarentena para causar compras de pánico y proyectar al exterior una visión de caos.

OPS preocupada

En su más reciente boletín la Organización Panamericana de la Salud (OPS) asegura que Nicaragua se encuentra en plena fase de transmisión comunitaria; es decir, hay contagios a los que no se les puede seguir el rastro epidemiológico.

En el reporte de este domingo 24 de mayo el organismo regional indica que la vecina nación tiene 279 casos confirmados y 17 muertes y enfatizó en que este país registra contagios comunitarios.

Sin embargo, el Ministerio de Salud (Minsa) no se ha pronunciado sobre lo indicado por la OPS y hasta minimiza la pandemia.

En diez de los diecinueve hospitales destinados por el Ministerio de Salud para enfrentar la pandemia de la COVID-19 hay aproximadamente 600 personas hospitalizadas con síntomas de esta enfermedad, algunas ingresadas en Cuidados Intensivos y conectadas a ventiladores, según denuncias de familiares y fuentes médicas.

En promedio, en estos hospitales de referencia nacional destinados a la atención de pacientes con coronavirus, a diario fallecen entre 15 y 20 personas, algunos días incluso más de 30, con complicaciones de salud asociadas a la enfermedad.

El escenario más aterrador se vive en el Hospital Alemán-Nicaragüense, de Managua, el primer centro hospitalario donde se habilitó un área de aislamiento para pacientes positivos o sospechosos desde finales de febrero, aunque el Gobierno confirmó el primer caso hasta el 18 de marzo.

Según la Unidad Médica Nicaragüense (UMN), el Hospital Alemán tiene 276 casos de unos 500 pacientes con síntomas de COVID-19 hospitalizados en todo el país, aunque el Ministerio de Salud califica a la mayoría como casos “indeterminados” o “neumonía atípica”.

En el área del Portón No. 2, que fue habilitado en este Hospital para la atención de la pandemia, a diario se llenan las pocas camas que puedan quedar disponibles, mientras una fila de cadáveres envueltos en sábanas aguarda en los pasillos ante los cupos también topados en la morgue. Fuentes médicas consultadas por CONFIDENCIAL estiman un promedio diario de 10 a 15 fallecidos solamente en ese hospital.

El Minsa “está reforzando el Hospital Alemán con médicos residentes del Hospital Lenín Fonseca, del Manolo Morales, y hay un plan para reforzar los hospitales con médicos generales que provienen de los centros de salud”, dijo una fuente médica que pidió no ser citada para este artículo.

El neumólogo Jorge Iván Miranda, que atiende en el Hospital Monte España, critica que la cifra de 17 fallecidos por COVID-19, que admite el Minsa, “no tiene nada que ver con la realidad”, ya que a diario en los hospitales registran personas fallecidas y esa es una realidad “a simple vista”.

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Cifras por debajo de la realidad

¿Cómo se explica esta paradoja en un país que tiene además uno de los sistemas de salud peor financiados de toda América Latina?, se preguntó BBC Mundo días atrás.

¿Y qué hay detrás de los reportes de un dramático aumento en el número de nicaragüenses acudiendo a los hospitales con graves afecciones respiratorias o muriendo por «neumonías atípicas«,como pareció reconocer involuntariamente el propio presidente Daniel Ortega en su última comparecencia pública?

Así que para tratar de arrojar algo de luz al respecto, la cadena británica recurrió a uno de los antiguos directores de vigilancia epidemiológica del Minsa, el médico Álvaro Ramírez, quien ofreció una sencilla respuesta: que las cifras oficiales están muy lejos de la realidad.

¿Le parecen creíbles las nuevas cifras? “No, no son creíbles. Esas cifras solo son la punta del iceberg, para tratar de reducir la tasa de mortalidad del 32% al 6,7% y salir así del listado de la tasa de letalidad más alta del mundo.

“Se dieron cuenta del error matemático que estaban cometiendo. Pero los datos publicados son otra parte de la manipulación, porque solo ese número -los 229 casos nuevos que reportan, que se suman a los 25 que reconocían antes para llegar a – son los que ahorita están hospitalizados en el Hospital Alemán, para decirte algo”, indicó el especialista.

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