Sergio Arce
Los llamados casi desesperados del sector comercial de Costa Rica para que se les permita volver a operar y no hundirse en más deudas, despidos o jornadas suspendidas no son en vano, según datos aportados este martes por la Cámara de Comercio.
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La gremial indica que a la fecha la crisis causada por la pandemia en el sector ronda el 3,2% del Producto Interno Bruto de Costa Rica, lo que equivale a unos $1.850 millones.
Este monto es 2,1 veces superior al impacto causado al segundo mes de la crisis, cuando el sector comercial reportó una pérdida de más de $840 millones (1,5% del Producto Interno Bruto del país).
Una encuesta realizada entre 380 negocios (90% Mipymes) reveló que entre el 26 de junio y 2 de julio al 85% de los comercios se le cayeron las ventas, un 11% las logró mantener y solo un 4% las aumentó.
Adicionalmente, el 34% de las empresas afirmó que estas pérdidas superan el 50% de sus ventas y un 20% enfrenta pérdidas superiores al 75% de sus ventas anteriores.
La misma encuesta arrojó que el sector ha perdido 35.544 empleos, otras 35.331 plazas fueron suspendidas, y se redujeron 66.919 jornadas laborales. En total la afectación en el sector es de 137.794 trabajadores.
Otros datos de la encuesta:
- El 53% de las empresas se encuentra trabajando con operaciones reducidas de alguna forma, incluyendo una menor producción, cierre de sucursales, etc.
- El 10% de los comercios no está operando en su totalidad, mientras que el 43% está operando parcialmente, en su mayoría a menos de la mitad de su capacidad.
- El porcentaje de comercios que se ha visto obligados a reducir su personal durante la emergencia nacional es del 45%.
- La cantidad de comercios que ha implementado el teletrabajo es del 61%.
La Cámara de Industrias, por ejemplo, manifestó su disconformidad con la prolongación de las medidas y advierten que más familias se verán afectadas por la falta de empleo.
«Parece que el anuncio del 20% de desempleo no preocupó a las autoridades. Somos conscientes que tenemos una crisis de salud, pero la crisis económica va a destruir al país. Con estas medidas van a quebrar las empresas, va a aumentar el desempleo, se incrementará la incertidumbre y se destruirá la economía», señaló Enrique Egloff, presidente de Industrias.
«No entendemos cómo empresas de comercio, de turismo y restaurantes tienen listos, aprobados y cumplen con los protocolos sanitarios y no las dejan operar ¿Para qué se hicieron entonces esos protocolos?», agregó.
Según los empresarios de este sector, la apertura de los comercios es clave para la reactivación de la economía y sectores como el industrial están encadenados a esa apertura, sino los productos manufactureros se quedarán encerrados en bodegas», indicó la CICR.
La actividad de comercio también se ha posicionado en contra de la prolongación de los cierres, luego de que a mediados de la semana anterior se les dijera que este lunes podrían reabrir sus locales, pero el viernes se anunciaron medidas más restrictivas.
«Manifestamos nuestra inconformidad del cierre masivo de comercios. El poder abrir y trabajar es clave para la reactivación; hoy más de 135 mil empleos se han visto afectados entre despidos, cese de jornada y reducción laboral», dijo Julio Castilla, presidente de la Cámara de Comercio.
Las restricciones han provocado el cierre de cientos de negocios, comercios y restaurantes (Manuel Sancho/El Observador).
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«Hay que sumarle 150 mil familias más que se quedarán sin trabajo. Reiteramos un vehemente llamado a permitir la apertura de tiendas, restaurantes y comercios, no hay dato que demuestre que los contagios se dan en nuestros locales», agregó el líder del sector comercial.
El ministro de Salud, Daniel Salas, continúa defendiendo el cierre comercial hasta el próximo 31 de julio, bajo la premisa de reducir los riesgos de contagio en lugares públicos.
El domingo anterior, el jerarca señaló que si bien los protocolos bajan el riesgo de transmisión del virus, no lo eliminan. Asimismo, recalcó el aumento de casos sobre todo en el Gran Área Metropolitana
Impacto en Centroamérica
La Federación de Cámaras de Comercio de Centroamérica (Fecamco) entrevistó a representantes de más de 700 empresas en la región. Y la situación es igualmente apremiante que en Costa Rica:
- El 77% de las empresas ha reducido la jornada laboral a más de 26 mil empleados, a quienes su jornada se les ha reducido en promedio 32 horas a la semana, trabajando únicamente en promedio unas 16 horas. De continuar este panorama en los próximos meses las empresas manifestaron que estarán reduciendo su fuerza laboral en un 30%.
- Las empresas siguen teniendo grandes problemas de liquidez y el 44% manifestó que solicitaran crédito para hacer frente a sus compromisos financieros.
- Según el sondeo, se estima que de existir una reapertura inmediata, equilibrada y responsable, el 47% de las empresas necesitarán de 10 meses a más de un año para lograr la facturación que se tenía antes de la crisis.
- Las empresas siguen afectadas ante la falta de una reapertura económica equilibrada y responsable. El 60% manifestó que está operando parcialmente y, de este grupo, solo el 50% lo hace por debajo del 40% de sus capacidades.
- Un 85% de este grupo indicó que sus ventas han disminuido y un porcentaje considerable de encuestados indicó que esta caída en sus ventas es en más de un 75%.
