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Polémica agencia de publicidad habría incidido a su favor en proceso de contratación de Procomer

La empresa Bambú Capital (conocida comercialmente como Interaction), ganadora de un concurso por ¢150 millones con Casa Presidencial, busca ahora…

Por Tomás Gómez

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Polémica agencia de publicidad habría incidido a su favor en proceso de contratación de Procomer
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La empresa Bambú Capital (conocida comercialmente como Interaction), ganadora de un concurso por ¢150 millones con Casa Presidencial, busca ahora un contrato por ¢131 millones en la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) en un proceso que no está exento de polémica.

De acuerdo al procedimiento 2019PP-000014-0001700001, publicado en el Sistema Integrado de Compras Públicas (Sicop), Procomer busca una agencia de comunicación digital para manejar la marca país “Esencial Costa Rica” y potenciarla entre exportadores costarricenses y empresarios extranjeros.

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Según un correo al cual El Observador tuvo acceso, el equipo de Bambú Capital, que para fines comerciales se hace llamar “Interaction”, habría conversado sobre términos específicos de la licitación en la que ahora participan.

Los términos de los cuales se conversa en dicha comunicación terminaron siendo muy similares a los señalados posteriormente en la publicación del cartel.

Ronda de consultas previas

La convocatoria fue publicada el 2 de julio, sin embargo, su proceso de preparación inició desde febrero con una serie de consultas a potenciales empresas contratadas según admitió Procomer.

Tras las consultas de este medio, la organización admitió, a través de su oficina de prensa, que le hizo consultas previas a las empresas Arweb, Findasense y Double Digit, así como a Bambú Capital/Interaction.

Mediante su departamento de comunicación, Procomer defendió que se les había preguntado por “las calificaciones de los distintos profesionales en cada caso, el precio aproximado de los servicios, los plazos de respuesta y en general cualquier tipo de condición importante para la plena satisfacción del interés público correspondiente”.

Pese a ello, en el correo electrónico cuestionado, los trabajadores de Bambú Capital/Interaction hacen mención de temas más allá de los que supuestamente se les habría cuestionado:

Como lo deja ver dicha conversación, sostenida entre la directora de cuentas Ana Chinchilla y el representante de la empresa Erick Apuy, la información referente al concurso de Esencial Costa Rica fue más allá los puntos reconocidos por Procomer.

El intercambio data del 25 de abril, es decir, cuando el proceso de elaboración del cartel ya había arrancado.

Una serie de similitudes

Al comparar lo conversado por el equipo de Bambú Capital con las exigencias planteadas en el cartel de Procomer, aparecen varias similitudes:

También, hay similitudes entre el correo y el cartel en cuanto al recurso humano que se le estaría exigiendo a la empresa.

Por un lado, los empleados de Bambú Capital sugieren que “la empresa debe contar con equipos independientes de diseño y desarrollo web, un departamento dedicado al soporte técnico, mercadeo digital y redes sociales”.

En el cartel, por su parte, Procomer pide que “la empresa debe contar con funcionarios dedicados al diseño y desarrollo web, profesionales dedicados al soporte técnico, profesionales dedicados al mercadeo digital, y funcionarios dedicados a las redes sociales. El tamaño mínimo de este equipo de trabajo deberá ser de al menos una persona por cada puesto”.

Procomer es una entidad pública de carácter no estatal, que tiene a su cargo la promoción de las exportaciones costarricenses. Fue creada en 1996, mediante Ley Nº 7638, para asumir las funciones que hasta ese momento realizaban la Corporación de Zonas Francas de Exportación, el Centro para la Promoción de Exportaciones e Inversiones (Cenpro) y el Consejo Nacional de Inversiones.

Todos se justifican

El Observador contactó a todas las partes involucradas en este caso.

Procomer, además de los detalles ya descritos, sostuvo que su actuación respondió a un “estudio de mercado” y justificó que se trata de una figura avalada por la Contraloría General de la República.

Ana Chinchilla, aparente autora del correo, indicó telefónicamente que los procesos de licitaciones eran vistos exclusivamente por su jefe Erick Apuy y que no tenía idea de cual email se le hablaba. Cuando se le hizo envío de la transcripción del mismo dejó de contestar los mensajes.

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Apuy, por su parte, adujo que las comunicaciones previas entre su negocio y Procomer correspondieron solo a “experiencia y capacidad de la empresa”.

A las repreguntas, institió en hubo comunicación entre ambos “únicamente para contestar las preguntas anteriormente mencionadas”.

Bambú Capital vuelve a la polémica

“Bambú Capital” lleva varias semanas bajo cuestionamiento luego de ganar la licitación millonaria con la que el Gobierno pretende mejorar su comunicación.

Se trata de una inversión inicial por ¢150 millones para lo que resta del año pero que podría prorrogarse por ¢175 millones para el 2020, 200 millones para el 2021 y 220 millones en el 2022.

Este medio dio a conocer que en su oferta, Bambú Capital había anexado cartas del expresidente liberacionista José María Figueres y del exjefe de campaña de Rodolfo Piza, Johnny Leiva.

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Ambas misivas fueron desmentidas por los partidos: mientras el PLN señaló que en la liquidación de la campaña figuerista no se incluyó ningún contrato con la empresa, el PUSC emprendió un proceso de investigación contra Leiva.

Al respecto, la Ministra de Comunicación, Nancy Marín, se excusó diciendo que el Gobierno había confiado en los documentos aportados.

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