Paula Ruiz
Un pulso evidente entre los diputados Roberto Thompson y Carlos Ricardo Benavides, ambos del Partido Liberación Nacional (PLN), quedó en evidencia este lunes por el proyecto de ley que pretende trasladar los feriados que restan del 2020 y los del 2021 a los días lunes.
Para hoy se tenía prevista la aprobación en segundo debate de la iniciativa impulsada por Thompson, que pretende reactivar el turismo nacional. Sin embargo se puso sobre la mesa una moción para retrotraer el proyecto de ley.
Quienes pretendían su retroceso justifican que hay cuatro domingos que serán trasladados como feriados para el lunes, lo cual implicaría un impacto económico para pequeñas y medianas empresas (pymes), quienes deberán de pagar doble a sus trabajadores un día que ya se tenía contemplado como ordinario, o bien cerrar su negocio durante ese lunes.
Según Benavides el impacto sería de ¢116.000 millones para sector privado y ¢50.000 millones para el sector público, porque deberán de pagar el día doble o no operar. El legislador citó el ejemplo de los policías a quienes se les deberá de realizar el pago.
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La verdiblanca Yorleny León respaldó a Benavides, al aducir que hay un criterio de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) con fecha del 26 de junio, donde la institución advierte del impacto financiero así como para asegurados que verían afectada la reprogramación de sus citas.
“La Caja Costarricense de Seguro Social considera loable el objetivo del proyecto de ley al pretender reactivar la economía del país a través del sector turismo, al trasladar algunos feriados al lunes y así incentivar el turismo nacional, no obstante se objeta el proyecto de ley dado que según el criterio técnico de la Gerencia Financiera oficio GF-3764- 2020, existiría un impacto financiero para la Institución, dado que provoca a corto plazo un impacto negativo en las finanzas institucionales; esto debido al aumento en los costos por reprogramación de las atenciones en los diferentes servicios que brinda la Caja, especialmente de salud, además, representa un incremento en los pagos de días dobles y el incentivo de Días Feriados, a los funcionarios que laborarían el día lunes (feriado)”, indica el criterio.
La moción para retrotraerlo comenzó a ganar adeptos. Pero Thompson reclamó al Plenario para recordarles cuál es el sector más golpeado por la pandemia hasta este momento.
Los cuatro domingos en discusión son:
- 2 de agosto de 2020
- 11 de abril de 2021
- 25 de julio de 2021
- 15 de agosto de 2021
En la discusión también participó el socialcristiano Erwen Masís, quien resaltó el impacto para pymes que en la actualidad están viendo “cómo llegar al otro lado de la orilla sin ahogarse”. Advirtió que trasladar feriados ya calendarizados para fines de semana hacia los lunes no tendrá su apoyo.
La oficialista Paola Vega abogó por la solidaridad de emprendedores y empresarios aunque estén siendo golpeados en la actualidad.
Al final la moción obtuvo 31 votos de respaldo frente a 14 que lo rechazaron. Sin embargo no se efectuó la retrotracción del proyecto porque requería de mínimo 38 votos. Pero la discusión siguió.
La votación también dejó en evidencia la marcada división en la bancada liberacionista, entre quienes respaldan a Thompson y quienes se inclinan por Benavides.
Los días feriados serán de la siguiente forma:
¿Y la Comisión?
La iniciativa tiene como objetivo impulsar el turismo nacional, debido al impacto por la pandemia. (Camara de Turismo de Nosara)
El diputado Benavides reclamó a la Comisión de Asuntos Económicos donde se estudió y dictaminó el proyecto, sobre la ausencia de datos por el impacto para las empresas y el sector público.
Incluso reconoció que con esa propuesta los propios congresistas se recetaron cuatro días feriados, que inicialmente no están contemplados por caer domingo.
“Estamos hablando de cuatro días en dos años y aquí venimos a discutir sobre números a mano alzada. No tengo ese documento pero sí del ICT que apoya, de Cámara Nacional de Turismo que urge el proyecto, estamos discutiendo por cuatro domingos en dos años y cambiarlo por 2022 cuando hay tres lunes feriados”, dijo Thompson.
“He tenido que buscar los números (del impacto financiero). Si la Comisión de Económicos hubiera dicho cuál es el costo de siete días adicionales para sector público y privado, no tendríamos que andar en esto”, respondió Benavides.
Thompson preside dicha comisión y defendió el foro legislativo por los señalamientos de Benavides, al indicar que se trajo al Plenario un proyecto de ley sin su completo estudio.
Daniel Ulate, también liberacionista (separado de la bancada desde enero), salió en defensa de su trabajo en la comisión que también integra.
“No vale venir al Plenario a faltar el respeto a sus propios compañeros. Creo que eso no vale la pena”, señaló Ulate, quien tiene una abierta diferencia con Benavides.
Al final, el proyecto no fue discutido ni sometido a votación para segundo debate. El oficialista Enrique Sánchez sugirió la búsqueda de un acuerdo para evitar que la iniciativa no fuera aprobada.
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