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Salvataje a deudores no será para todos: dependerá de garantías, capacidad de pago y manchas por morosidad

Beneficiarse del plan de salvamento para deudores que anunció el Gobierno no será tan fácil como solicitarlo en una oficina…

Por Juan Pablo Arias

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Salvataje a deudores no será para todos: dependerá de garantías, capacidad de pago y manchas por morosidad
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Beneficiarse del plan de salvamento para deudores que anunció el Gobierno no será tan fácil como solicitarlo en una oficina de los bancos BCR, Nacional o Popular.

Cada una de estas entidades financieras aplicará sus propios filtros para determinar si la solicitud del deudor cumple con sus requisitos internos y parámetros de riesgo. 

La carencia de garantías reales, las manchas en el historial crediticio o la poca capacidad de pago son elementos que juegan en contra de quienes aspiran a reducir la cuota de sus deudas.

Uno de los aspectos a tomar en cuenta es que los créditos de consumo (como las tarjetas de crédito, las compras en almacenes o los préstamos sin fiador) se extienden por plazos cortos, de 3 a 5 años, y en la mayoría de los casos la garantía es personal. 

De manera simplificada, una garantía personal corresponde al patrimonio presente y futuro del deudor. Por ejemplo, el salario.

Préstamos con plazos más largos, como los ofrecidos por el plan de salvamento -a 15 y 20 años-, por lo general requieren una garantía real, es decir, bienes muebles o inmuebles.

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El Observador consultó a cada uno de los bancos sobre el perfil de los deudores que aceptarán dentro del programa, así como las garantías que deben aportar o los requisitos que deben cumplir.

(Archivo | El Observador)

Banco de Costa Rica (BCR)

El BCR dará prioridad a sus propios clientes, en especial a aquellos con buen comportamiento histórico de pago y que tengan deudas de consumo o tarjetas en otras entidades financieras y comerciales, con tasas más altas y plazos más cortos.

En una primera etapa y mientras no estén aprobadas las iniciativas de ley promovidas por el Poder Ejecutivo, se hará una oferta específica a clientes con garantía real.

Específicamente, el banco tomará en consideración a los clientes que tengan una garantía mobiliaria o inmobiliaria.

La principal diferencia respecto a sus planes regulares de readecuación de deudas es que se amplía el plan de inversión para permitir la cancelación de deudas con entidades no reguladas por la Sugef.

Además, se eleva el porcentaje de endeudamiento permitido y se ajusta la tasa de interés para mantenerlo dentro de los parámetros del programa.

Quienes aparezcan en el Centro de Información Crediticia (CIC) con calificación 2 o 3 (que tuvieron manchas en su historial crediticio), no podrán participar del programa. 

El Banco aún no tiene una estimación de cuántos clientes se podrían beneficiar con el plan.

(Archivo | El Observador)

Banco Popular

El Banco Popular también comenzará por ayudar a sus propios clientes. El primer requisito es que reciba el depósito del salario en esta entidad, o bien, que haga la gestión de traslado.

En una primera etapa, la prioridad serán clientes cuyos niveles de endeudamiento sobrepasen el 80% de sus ingresos y que con el arreglo la nueva relación cuota-ingreso sea menor a un 70%.

Las deudas a refundir son las que el asalariado tenga registradas antes del 30 de setiembre pasado. Se reestructurará todos los segmentos de ingresos. 

El monto máximo con la suma de todas las deudas a refundir será de ¢30 millones, con garantía de un pagaré. Si el deudor tiene una garantía real, el monto máximo dependerá de la capacidad de pago.

Además, el salario líquido después de la refundición debe ser mayor a ¢190 mil colones. La cuota del préstamo se rebajará de planilla.

Para este banco, la prioridad no será la garantía, sino la capacidad de pago del deudor.

A diferencia de sus planes de readecuación regulares, con este programa se van a flexibilizar algunas condiciones, como por ejemplo la justificación de la situación económica y se aumenta además el monto a refinanciar sin garantía real de ¢25 millones a ¢30 millones.

En el Popular, el programa si estará disponible para personas que tengan manchas en su historial crediticio, hasta un máximo definido por la dirección de Riesgo.

En la primera etapa, el banco cree que podría atender unas 25 mil personas.

(Archivo | El Observador)

Banco Nacional

El Banco Nacional es el que menos claridad tiene sobre cómo implementará el programa.

Prevé iniciarlo en aproximadamente tres meses; esto porque -en opinión de la entidad- la directriz presidencial requiere ajustes en los programas de crédito.

Además, revisarán aspectos adicionales, como el programa específico de educación financiera.

También esperarán cambios regulatorios, entre los que destaca que la gente quede inscrita en el CIC, para así conocer que la persona está sujeta al programa de salvamento.

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Los datos consignados en esta información fueron proporcionados por Renán Murillo, subgerente de Banca de Personas del BCR; Maurilio Aguilar, director de Riesgo del Banco Popular y la Dirección General de Relaciones Institucionales del Banco Nacional. 

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