Paula Umaña
El sector productor de banano de Costa Rica está preocupado ante cambios inminentes en el manejo de los productos químicos que usan en sus cultivos, por obligaciones señaladas desde Europa. Se trata de una reducción de los límites máximos de residuos de plaguicidas ejecutados por la Unión Europea (UE).
Estas medidas se enmarcan en el “Pacto Verde Europeo” (The European Green Deal), el plan con el que la UE pretende reducir el calentamiento global y llegar a la carbono neutralidad para el 2050.
Según los productores, esta región pretende minimizar casi a cero los miligramos de residuos por kilogramo de producto, es decir a niveles mínimos detectables.
Un límite máximo de residuos (LMR) es la concentración máxima de los residuos de un plaguicida, expresada en mg/kg, que se permite legalmente en los alimentos.
“The European Green Deal” cambia múltiples dinámicas y obligaciones. Uno de los ejes es “From Farm to Fork” (de la finca al tenedor) que busca diseñar un sistema alimentario “justo, saludable y ecológico”.
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Felipe Vargas, presidente de la Asociación Nacional de Productores Independientes de Banano (Anaproban), aseguró que parte de las medidas se han tomado sin las bases científicas necesarias.
“Lo que están pretendiendo al bajar los niveles de residuo a prácticamente a cero, es que nos están dejando sin la posibilidad de producir para exportar a esos mercados”, dijo Vargas.
El presidente de la Corporación Bananera Nacional (Corbana), Jorge Sauma, resaltó que las medidas no afectan únicamente a la exportación de bananos, sino a todos los productos frescos que se exportan a la UE.
Los productores explicaron que el problema no es precisamente la reducción de los niveles de residuos, sino el poco tiempo que se brinda para utilizar alternativas y el rezago del país en la modernización de agroquímicos.
Las sustancias utilizadas por Costa Rica – pese a que son poco modernas – son permitidas por los organismos reguladores de la materia tanto a nivel regional como europeo. No obstante, las plantaciones se han hecho resistentes a los efectos de estos plaguicidas, por lo que se necesita de un mayor número de fumigaciones.
Actualmente la Unión Europea sacó de la lista de químicos permitidos las sustancias Buprofezin, Imazalil y Clorpirifós. No obstante, el sector mencionó que sí se cuentan con sustitutos para estos.
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Incertidumbre en el sector
En países de América Latina ya los sectores exportadores se han quejado de las nuevas medidas. (Cámara Marítima de Ecuador)
Juan Rafael Lizano, presidente de la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria, afirmó que hay incertidumbre en el sector, puesto que en algunos meses la UE podría excluir de la lista de químicos permitidos los que se utilizan en el país.
Por el momento las medidas no han representado problemas para el banano u otros productos. No obstante, Vargas señaló que la UE plasmó setiembre como el plazo para el inicio de los análisis con niveles más bajos, por lo que el panorama podría complicarse. Las disposiciones de la UE son de rápido acatamiento.
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El productor también criticó que las pruebas toxicológicas a los productos incluyen la cáscara del banano, a pesar de que no es consumida.
Sauma agregó que Corbana pretende producciones sostenibles y que la Comisión Ambiental Bananera está en la constante búsqueda de alternativas a los químicos utilizados.
La afectación a la exportación de bananos sería uno de los casos más serios para el sector agrícola, al ser uno de los tres productos que más se despacha a la región europea. Según datos de Corbana, en el 2019 se enviaron 120 millones de cajas de banano a todos los destinos de exportación, lo que significó alrededor de $1.000 millones.
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Encrucijada con los agroquímicos
Costa Rica está en una encrucijada que data de años, en la gestión de agroquímicos: mientras se pretenden mejores prácticas agrícolas para el ambiente, el país lleva al menos una década de no inscribir nuevas moléculas para estas sustancias.
“Ya las enfermedades tienen resistencias (…) Tenemos un problema serio si el Gobierno y el Ministerio de Agricultura no inscriben nuevas moléculas. Estamos en peligro por la ineficiencia de los últimos gobiernos”, comentó el presidente de Cámara de Agricultura.
Anaproban lamentó la poca celeridad que hay en el registro de nuevos agroquímicos en el país.
“Estamos totalmente entrabados. Es imposible inscribir una molécula nueva (…) nos llevan a los mínimos detectables de residuos con los productos que hemos venido usando y no tenemos los mecanismos para incluir agroquímicos más amigables”, cuestionó Vargas.
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Según había indicado a El Observador el ministro de Agricultura y Ganadería (MAG), Renato Alvarado, actualmente trabajan para poder inscribir nuevas moléculas en los próximos meses.
“Se han dado esfuerzos para resolver este tema, que tiene desde hace tiempo sin resolución. En el gobierno pasado se sacó un decreto que resolvía, pero fue impugnado. Se ha judicializado mucho y hemos sufrido una gran dificultad para poder resolver de manera eficiente”, destacó Alvarado.
“Ya identificamos que tenemos un problema de admisibilidad de los requisitos, ya tenemos un protocolo de requisitos para que se pueda admitir el expediente del producto y un plan piloto”, concluyó el jerarca de Agricultura.
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Paula Umaña
Un viaje diario entre palabras, versiones, hechos y verdades. Una periodista en constante aprendizaje, con el sueño de ser bióloga marina y sumergirse en las historias más profundas del gigante acuático.
