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Sin conexión ni computadora: pandemia agrava desigualdades históricas en estudiantes

Más de un millón de estudiantes están recibiendo clases desde sus casas, a raíz de la suspensión del curso lectivo…

Por Elizabeth Rodríguez

Tiempo de Lectura: 3 minutos
Sin conexión ni computadora: pandemia agrava desigualdades históricas en estudiantes
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Más de un millón de estudiantes están recibiendo clases desde sus casas, a raíz de la suspensión del curso lectivo presencial que provocó la pandemia por COVID-19. La crisis provoca muchos cambios y capacitaciones del Ministerio de Educación Pública (MEP).

Al mismo tiempo aumentan los problemas para miles de jóvenes en vulnerabilidad, que ven muy complejo seguir las lecciones de forma virtual. El MEP detectó que 250.000 estudiantes no tienen acceso a Internet para recibir la educación a distancia, casi una cuarta parte del total de los matriculados.

El Programa Estado de la Nación alertó que la brecha digital afecta no solo a aquellos que viven en hogares de menor nivel socioeconómico, sino también en territorios fuera de la Región Central.

Antes de que la pandemia azotara al país, la Encuesta Nacional de Hogares del 2019 resaltó que en la Región Central:

  • un 67% de los estudiantes tenía conexión a Internet desde el hogar
  • un 29% tenía acceso únicamente a través de un celular
  • y un 3% no tenía ninguna conexión

La situación contrastó significativamente con regiones como la Huetar Caribe, la Norte o la Brunca, donde la conexión desde el hogar rondaba alrededor del 40%. Además el 50% establecía conexión por medio de un dispositivo móvil, y cerca del 10% no tenía acceso del todo.

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Brechas históricas que se profundizan

Miles de estudiantes de centros públicos están educándose a distancia, pero alrededor de la mitad no tiene posibilidades idóneas para conectarse. (Archivo)

Las brechas digitales reflejan las desigualdades territoriales históricas que se han mantenido en el país. Están asociadas al bajo desarrollo relativo y socioeconómico que ha caracterizado a las regiones de la periferia. El contexto actual profundiza aún más esas diferencias en el acceso a la educación.

Así lo señaló el Estado de la Nación en su artículo “Brecha digital y desigualdades territoriales afectan acceso a la educación“, el cual además suma el hecho de que el personal docente en esas zonas también presenta diferencias.

En las regiones Huetares una quinta parte de los docentes de centros educativos públicos tienen conexión a Internet solamente por el teléfono celular.

Como si fuera poco, se agrega a las brechas regionales el acceso a equipo de cómputo. En el 2019, apenas la mitad del estudiantado de las regiones Huetares y Chorotega había usado computadora en los últimos tres meses y el acceso a esta era bajo.

“En algunos hogares la presencia de este equipo no garantizó el acceso al estudiante, por lo que resalta el papel que juega el centro educativo para facilitar su uso”, destacó el artículo, que reiteró hallazgos del Informe Estado de la Educación.

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Actuar con rapidez

Las investigadoras de Estado de la Educación también urgieron a actuar con rapidez y con visión estratégica para que la conectividad sea un derecho fundamental para todas las personas.

Roberto Sasso, máster en ciencias de la computación (mencionado en el artículo) recomendó, en entrevista con Costa Rica Noticias, crear un “Bono de Conectividad” para atender la crisis educativa, con recursos del Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Fonatel), así como se creó el Bono Proteger.

“Internet agrega más valor entre más remoto esté la persona. El programa de conectar las escuelas debería de empezar por los centros educativos más lejanos y venir hacia el centro”, comentó Sasso.

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