[Video] Así es por dentro el edificio legislativo que cambiará el paisaje de San José

“Cajón”, “feo”, “sin ventanas”, son algunos de los epítetos que se han lanzado hacia el nuevo edificio de la Asamblea Legislativa, estructura que se encuentra a un 85% de su construcción.

Son 800 trabajadores, los encargados de cada detalle del edificio de 21 pisos, donde estarán las 57 oficinas de diputados, el plenario, las comisiones, salones de reuniones, el cafetín, la barra de prensa, la barra de público y varios espacios de acceso público.

Un equipo de El Observador, visitó las obras esta semana, que tienen una autorización presupuestaria por hasta ¢86.250 millones mediante un fideicomiso con el Banco de Costa Rica (BCR).

La visita guiada fue dirigida por Marlon Velásquez, ingeniero civil de la Asamblea Legislativa.

Dentro de los aspectos a tener en cuenta están, que el inmueble contará con ventanas en 10 niveles al lado oeste, incluso unas se mantendrán abiertas para el ingreso de aire, el cual servirá para mantener la temperatura en el edificio y el ahorro en uso de aire acondicionado.

La edificación es bioclimática, por lo tanto, se espera el ahorro mensual de hasta 30% en el pago de electricidad y agua, porque además, las aguas freáticas y pluviales se reutilizarán para servicios sanitarios y aires acondicionados.

Cumple la Ley 7.600

En días pasados, Nicole Mesén, presidenta de la Asamblea Nacional de la Persona Joven, alzó la voz en beneficio de las personas con discapacidad.

Ella aseguró que el edificio no tenía rampa de acceso para evacuar el inmueble en caso de una emergencia.

Sin embargo, el ingeniero defendió que el nuevo edificio tiene ascensor, señalización, es de fácil acceso y se busca implementar un software llamado lazarillo para personas no videntes.

Además, tiene rampas para garantizar la accesibilidad tanto para personal como par diputados que lo requieran y los servicios sanitarios cumplen con la Ley 7.600.

Se espera que la entrega de la obra gris esté lista para febrero o más tardar marzo próximo.

Ahí comenzará una nueva etapa de traslado de equipos de cómputo y teléfonos, entre otros, que se extenderá durante el primer semestre de 2020.

Edificio original 

En 2014, el entonces presidente de la Asamblea Legislativa, Henry Mora presentó lo que iba el nuevo edificio del Congreso, de la mano del arquitecto Javier Salinas, quien realizaría la obra mediante una contratación directa y no como una licitación.

En ese entonces, el inmueble estaría por encima de los edificios actuales, particularmente el principal y el Castillo Azul.

Sin embargo, la Contraloría General de la República descubrió una serie de irregularidades relacionadas con el pago a Salinas, pues se le giraron $690 mil pese a incumplir el requisito que se trajo abajo todo: el aval del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural.

La entidad de Cultura, no autorizó los planos porque iba a opacar los edificios que son patrimonio arquitectónico, así como parte del Museo Nacional.

Por eso, se inició con un nuevo diseño -el actual- el cual se construye desde mayo de 2018. Las huelgas han sido un factor para el retraso de las obras, pues, debido al cierre por ambas vías, ha impedido el paso de materiales.

Pese a eso, las críticas continúan desde diversos sectores de la sociedad, a la espera del edificio que acompañará la vista desde diversas partes de San José.

OBSERVE MÁS: Gobierno busca cooperación extranjera para reducir monto de préstamo por Teatro Nacional