Ojo Crítico

Opinión | El QR no debería servir para estigmatizar comercios

  Cuando se escribe este artículo ni siquiera se han cumplido 100 horas desde que se implementó el uso voluntario…

Por Juan Pablo Arias

Tiempo de Lectura: 2 minutos
Opinión | El QR no debería servir para estigmatizar comercios
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Cuando se escribe este artículo ni siquiera se han cumplido 100 horas desde que se implementó el uso voluntario del código QR en los comercios, pero ya hay una oleada de “cancelaciones morales” en las redes sociales.

La directriz del Gobierno parecía clara: los comercios que pidieran el QR podrían trabajar con 100% de aforo; los que no, solo debían seguir con el aforo limitado. En ningún caso se eliminan mascarillas, ni lavado de manos, ni desinfección, ni otras reglas de bioseguridad.
 
Teniendo claro lo anterior, es de extrañar que algunos ciudadanos empoderados en sus redes sociales, incluido un exministro, hayan decidido criticar y cuestionar la decisión de no pedir el QR, estigmatizando así a los comercios.

Esta actitud de “cancelación” a los negocios formales es preocupante, por al menos siete razones:

1. Porque nada obliga a los comercios a pedir el código, a menos que quieran trabajar con aforo del 100%. Muchos han preferido seguir limitados y esto no significa que sean antivacunas o que los favorezcan.

2. Porque los comercios están en todo su derecho de publicitar que no piden el QR, para no limitar su público. No están haciendo nada ilegal o cuestionable, ni están relajando medidas de bioseguridad.

3. Porque generar el QR, descargarlo y portarlo ha sido un dolor de cabeza para los ciudadanos. No había opción fácil de bajarlo o enviarlo a un wallet en el celular u otro dispositivo móvil. (Solo queda hacer una captura de pantalla o imprimirlo).

4. Porque nadie está obligado a consumir en un comercio. Si a un ciudadano no le gustan las políticas de un negocio, no va y punto. ¡Que es un país libre!

Claro que cualquier persona puede hacer público su disgusto o desazón. Pero, cuidado con el boicot, simplemente por no cumplir unas expectativas… detrás de cada comercio hay familias que dependen de él.

5. Porque los comercios que venden bienes de primera necesidad (como farmacias, supermercados, panaderías, etc) están habilitados para no pedir QR. Y aun así los están boicoteando.

6. Porque tenemos un gobierno (y sus dependencias) que ha demostrado una sobrada incapacidad en la generación de los códigos QR y ahora falla en explicar la política sobre su uso. El Ejecutivo tiró la piedra y escondió la mano.

7. Porque hace falta una reflexión como miembros de una sociedad. ¿Desde cuándo una autopercepción de superioridad moral e intelectual nos habilita a los ciudadanos a destruir reputaciones y boicotear negocios que no están incumpliendo ninguna ley?

Y esto aplica para todos, incluidos los provacunas y los antivacunas.

Ojalá el Gobierno -acéfalo en este momento, por el periplo del presidente Alvarado y su ministra de Economía, industria y Comercio a Oriente Medio- tome cartas en el asunto y comience una campaña en las mismas redes sociales, explicando el verdadero uso del QR y liberando de estigmas al sector comercial.

Dos años de aforos limitados y restricciones de horario tiene a muchos negocios al borde de la quiebra. De materializarse habrá un innegable efecto directo sobre el desempleo y la pobreza.

El autor es editor de Economía en El Observador

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