Redacción El Observador
El cuerpo médico del hospital Monseñor Sanabria, en Puntarenas, reiteró la solicitud a los usuarios y pacientes del centro médico de que brinden información real cuando son entrevistados en el puesto de ingreso denominado puesto A.
El llamado obedece a que una usuaria que fue atendida en el servicio de maternidad no informó que era contacto directo de un familiar que estaba siendo estudiado por COVID-19.
“Fue la pericia de los profesionales de la salud y un interrogatorio exhaustivo lo que permitió conocer la omisión en la información y activar los protocolos de atención, lo que logró diagnosticar a la paciente como positiva por COVID-19 en menos de 12 horas”, indicó la oficina de prensa de la Caja Costarricense de Seguro Social, en un comunicado.
“Conocido el resultado se aplicó la medida de aislamiento”, agregó.
A inicios de julio se conoció sobre una multa a una mujer y su esposo, quienes llegaron al hospital San Juan de Dios para labor de parto y no advirtieron que estaban contagiados de COVID-19. Por esta omisión se les multó con con cinco salarios base.
OBSERVE MÁS: Multan con ¢2,2 millones a mujer y esposo con COVID-19 que llegaron a hospital y no informaron de la enfermedad
La multa se aplicó con base en la recién modificada Ley de Salud. Para ese caso también se abrió una investigación judicial por el presunto delito de desobediencia por incumplimiento de orden sanitaria.
Análisis se hizo en Puntarenas
Según la CCSS, la oportunidad del tiempo para descartar el caso de la paciente en Puntarenas obedeció a que la prueba fue procesada en el laboratorio de Análisis Molecular del centro médico, que funciona desde el pasado 28 de agosto.
El hospital insistió en la obligación de acatar las demás medidas de prevención a su ingreso en el centro médico como son el lavado de manos, la toma de temperatura y el uso de mascarilla.
