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Padre y dos hijas son las primeras personas condenadas en Costa Rica por defraudar en impuestos

Un padre de apellidos Soto Mora y sus dos hijas, propietarios de almacenes de ropa, son las primeras personas en…

Por Christine Jenkins Tanzi

Tiempo de Lectura: 3 minutos
Padre y dos hijas son las primeras personas condenadas en Costa Rica por defraudar en impuestos
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Un padre de apellidos Soto Mora y sus dos hijas, propietarios de almacenes de ropa, son las primeras personas en la historia de Costa Rica que se condenan por defraudar a la Administración Tributaria.

Carlos Vargas, director general de Tributación, anunció la condena del caso que llamó “un antes y un después” en materia tributaria de Costa Rica. En total se trata de seis personas condenadas con 10 años de cárcel vinculadas al caso de una empresa familiar que importaba y comercializaba ropa y zapatos.

La empresa familiar defraudó al fisco por un monto superior a los ¢349 millones y fue denunciada desde el 2004 al Ministerio Público por la Dirección General de Tributación (DGT).

Luego de un proceso judicial de 16 años, la sentencia quedó en firme en junio anterior. Sin embargo, Vargas explicó que el anuncio se hace hasta ahora al finalizar el proceso de las órdenes de captura de las personas.

Padre e hijas defraudaron

El hombre de apellidos Soto Mora era el representante legal de las empresas y el accionista mayoritario de las sociedades involucradas. Mientras tanto, sus dos hijas de apellidos Soto Navarro, eran las encargadas de las ventas y de los ingresos percibidos.

Además, están condenados dos hombres de apellidos Murillo Hernández, quienes fungían como supervisores de zona, y un hombre de apellidos Huertas Barboza, contador del grupo empresarial.

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Es la primera sentencia en firme de este tipo en el país, que llega a agotar las garantías procesales hasta la última instancia.

“Esta sentencia de los Tribunales de Justicia sienta un precedente fundamental con el que
se demuestra que en Costa Rica es posible la condena por evadir al Fisco”, explicó Vargas.

“Es la primera vez en la historia del país en que se da una condena en firme por delito tributario, que además de afectar al contribuyente, recae sobre sus colaboradores”, agregó.

El monto de impuesto sobre las utilidades dejados de pagar superó los ¢149,7 millones para el año 2001 y los ¢230,8 millones para el año 2002.

Almacenes de ropa por todo Costa Rica

Las irregularidades se detectaron durante el procedimiento de inspección tributaria  contra una serie de personas físicas y jurídicas que conformaban una cadena de tiendas a nivel nacional.

En total, investigaron a 156 involucrados, con 53 personas jurídicas y 103 personas físicas.

Los locales de venta de ropa y zapatos del grupo se ubicaban en diferentes zonas del país. Sin embargo, cada uno fue inscrito de manera independiente bajo el Régimen de
Tributación Simplificada.

La investigación confirmó que se trataba de un grupo conformado por Soto Mora, su esposa de apellidos Navarro Blanco y sus tres hijos de apellidos Soto Navarro. Estos participaban como miembros de las juntas directivas de las personas jurídicas implicadas y eran socios de las mismas.

Mientras tanto, los dos supervisores de apellidos Murillo Hernández eran los encargados de recibir el dinero en efectivo y realizar los depósitos bancarios producto de las ventas. Por su parte, el contador era quien le daba sostenibilidad al esquema del ilícito, según explicó Vargas.

Levantaron secreto bancario

Durante la investigación, se realizó el levantamiento del secreto bancario para determinar que los ingresos eran depositados en cuentas bancarias del señor Soto Mora, de sus dos hijas, así como en cuentas bancarias de los dos hombres Murillo Hernández.

Además, se evidenció que parte de los ingresos gravables obtenidos de la actividad comercial, no fueron declarados al Fisco.

A la fecha, existen 21 casos pendientes de resolución por parte del Poder Judicial, por un
monto estimado de más de ¢20.800 millones, en impuestos dejados de pagar.

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