Desde la Columna
Gabriela Cerdas para El Observador
Uno de los secretos mejor guardados en San José, es Park Café, este restaurante “disfrazado” de tienda de antigüedades ubicado en Sabana Norte.
Por fuera no hay rótulo y parece una casona colonial. Una vez adentro se encuentra un laberinto de cuartos y pasillos llenos de antigüedades y se abre paso a un patio interno, y a un costado están las seis mesas que conforman este restaurante.
El restaurante de inspiración francesa es liderado por el chef Richard Neat, quién ha sido propietario y chef de dos restaurantes en Londres y Cannes que han sido galardonados con 2 y 1 de las prestigiosas estrellas Michelin, respectivamente.
El chef decidió montar raíces en Costa Rica, y junto a su pareja Louise, abrieron Park Café en el 2006.
Con tremendo preámbulo ya uno sabe que va a vivir una experiencia y las expectativas son muy altas.
Y de tapas…
El menú está compuesto de platos pequeños tipo tapas para compartir y platos principales. Me encantó esta opción de tapas para así poder degustar más platillos.
La influencia de la cocina francesa se ve en muchos de los platos, pero también la de muchas otras regiones, así que, sería mejor describirlo como: un restaurante de comida internacional.
De tapas ordenamos la pechuga de pato confit, acompañada de un mini taquito y ensalada de menta.
El pollo de Indonesia con ensalada de papaya y salsa satay estaba espectacular, todavía estoy pensando en la delicia de esa ensalada.
Luego seguimos con unas vieras envueltas en prosciutto montada sobre una tortilla española. Los platos son pequeños así que no se preocupen que pueden pedir sin medio.
Platos principales
De plato principal pedí la chuleta de cordero que viene acompañada de un tapenade de hongos y espinacas al vapor. Además de un pargo que es cocinado en una pasta de sal, que luego viene acompañado de paella, espárragos y salsa de coliflor.
La presentación del pargo es muy especial, viene primero dentro de la pasta de sal que viene en forma de pez. Hay calidad en la comida y en el servicio, y es en estos pequeños detalles en los que se nota el alto nivel del chef Nate.
Por la noche tienen un menú de degustación de 5 tiempos con maridaje incluido con un precio de ¢59.500, es un poco alto, pero vale la pena.
Es una excelente opción para celebrar ocasiones especiales y el ambiente es mágico. Park Café es uno de esos lugares que se queda en la memoria.
¡Nos vemos la otra semana!
Fotos: @Foodtinerary para El Observador.
Gabriela Cerdas
Amante de viajar y la buena comida
Instagram: @foodtinerary
www.foodtinerary.com
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