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Precios de alimentos con trigo y maíz podrían crecer en primeros meses del 2022

Incrementos por encima del 30% en el costo internacional del trigo y el maíz se reflejarían en los precios de…

Por Juan Pablo Arias

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Precios de alimentos con trigo y maíz podrían crecer en primeros meses del 2022
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Incrementos por encima del 30% en el costo internacional del trigo y el maíz se reflejarían en los precios de algunos alimentos nacionales en los primeros meses del 2022, aunque no en la misma magnitud.

Panes, galletas, pastas, carnes y embutidos son solo algunos de los productos que reflejarían un alza.

Así lo prevén representantes de la industria de alimentos, quienes participaron este miércoles en una conferencia de prensa sobre el balance anual de su actividad.

Maurizio Musmanni, presidente de la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (Cacia), explicó que aunque las empresas ya han asumido dichos incrementos dentro de su cadena de producción, los precios al consumidor final todavía no se han modificado.

“Existe rezago en el ajuste al consumidor final. No aumenta el precio al mismo tiempo que los costos. El ajuste puede reflejarse tres o cuatro meses después”, explicó

Por la dinámica del comercio, en específico de los supermercados, los precios no se modifican desde el 15 de noviembre pasado y muchos ajustes quedarán para enero, indicó.

Además, pese a que los aumentos en los costos internacionales de las materias primas son superiores al 30%, los consumidores no tendrían un incremento en la misma magnitud.

“No creo que llegue a esos niveles, no creo que sean aumentos desmedidos”, comentó Musmanni. La razón es que la industria podría absorber una parte del incremento para no perder una cuota de participación en el mercado.

Costos que influyen

No solo los costos del trigo y el maíz influyen sobre los precios de los alimentos en Costa Rica, también otros productos reflejan incrementos en sus costos, como los aceites vegetales, los combustibles y el transporte internacional.

Mario Montero, director ejecutivo de Cacia, explicó que en el caso del trigo el incremento interanual a noviembre ronda el 35%, mientras en el maíz es cercano al 30%.

Este último impacta no solo a la industria que usa el maíz directamente en su producción, sino a empresas que lo utilizan en la alimentación de animales, como el sector cárnico y de embutidos.

En el caso de las grasas vegetales los incrementos son del 40%. Y la crisis de contenedores ha elevado el costo del flete de un contenedor de $1.500 a $20.000 en un año.

Industria se recupera de la pandemia

“Este año sacamos la cabeza del agua y empezamos a respirar”, manifestó Montero en relación al balance general del año.

Este año, por primera vez, las exportaciones superaron la frontera de los $2.000 millones anuales, de acuerdo con cifras de Procomer analizadas por Cacia.

Asimismo, la industria en el régimen definitivo muestra un crecimiento interanual superior al 5% mientras que en el régimen especial (zonas francas) se aproxima al 25%.

Montero resaltó que la recuperación se logró pese a que las restricciones golpearon a sectores vinculados con actividades sociales y eventos.

También la depreciación del colón frente al dólar afectó costo de materias primas.

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