Christine Jenkins Tanzi
Para el presidente Carlos Alvarado, el repunte que se observa en los datos de actividad económica costarricense, es resultado de las acciones que ha tomado su Gobierno dentro del plan de reactivación
La actividad económica creció a una tasa interanual de 2,9% en noviembre, mostrando un repunte sostenido durante seis meses, según los últimos datos de actividad económica publicados por el Banco Central.
“En la entrevista de la semana pasada con Telenoticias les comenté que el Banco Central publicó un cierre del 2019 con 5 meses seguidos de crecimiento económico constante. Hoy vemos los últimos resultados y por 6 mes consecutivo nuestra economía refleja mejoría”, publicó el mandatario este lunes en su cuenta de Twitter.
“Este crecimiento es constante, resultado de las acciones que hemos ejecutado de cara a la reactivación de la economía. Queda mucho por hacer pero estos datos nos demuestran que sí se puede”, agregó.
[Hilo] En la entrevista de la semana pasada con @Telenoticias7 les comenté que el @BancoCentralCR publicó un cierre del 2019 con 5 meses seguidos de crecimiento económico constante. Hoy vemos los últimos resultados y por 6 mes consecutivo nuestra economía refleja mejoría. (1/2) pic.twitter.com/Zkyq42Wktn
— Carlos Alvarado Quesada (@CarlosAlvQ) January 13, 2020
Recuperación
El Banco Central publicó un comunicado este lunes, en el que destaca algunas de las razones detrás del repunte como la mejora en agricultura y servicios de enseñanza y salud.
Después de una recesión de varios meses, la agricultura pasó a crecer a un ritmo del 1,6%, ante una mayor producción de piña, banano y flores, que refleja la normalización del clima, mientras que en café en fruta se ve una recuperación de algunos cafetales que se encontraban en periodo de renovación, según el Banco Central.
En el caso del sector de educación y salud, se observa un efecto «rebote» por compararse contra un difícil periodo del 2018, cuando el país sufrió una larga huelga de empleados del sector público.
Este creció a un ritmo de 10% en noviembre. Pero de ese crecimiento, un 90% se debe al hecho de que se comparó con el periodo cuando se realizó la huelga de empleados del Ministerio de Educación.
Con esto, la actividad fuera de las zonas francas – conocido como el régimen definitivo – alcanzó un ritmo de 1,8% en noviembre contrastado con el punto bajo alcanzado en mayo (-0,1%).
“Esto confirma que el proceso de recuperación de la economía y del Imae como un todo se asienta en el repunte de las actividades en ese régimen, que representa el 90% de la producción total. En particular, la recuperación está siendo impulsada por el mayor dinamismo en las industrias agropecuaria y de servicios de enseñanza y salud”, explicó el Banco Central.
Por sector
Por otro lado, una mejora en la confianza de los consumidores se refleja en un crecimiento del 1% en el comercio, el cuarto mes de recuperación, ante una mayor comercialización de alimentos, vehículos, productos farmacéuticos y de cuido personal. Es la primera vez en 28 meses que la venta de vehículos presenta una variación interanual positiva.
Otras razones que incidieron en el mayor crecimiento, según el Banco, son la recuperación en las exportaciones al mercado centroamericano ante una situación más estable en Nicaragua.
El comunicado también destacó una reducción en las edificaciones con destino público del -23,4%, por reducciones presupuestarias, mientras que la construcción del sector privado cae un -8,7%.
Finalmente, destacó el dinamismo en las empresas de zona franca y en perfeccionamiento activo debido a la manufactura de dispositivos médicos y a los servicios de apoyo a empresas y de informática.
Las empresas ubicadas en estos regímenes especiales mantienen tasas de crecimiento de dos dígitos desde febrero.
Inflexión
Según el Banco, la mejora de la economía se puede ver especialmente al proyectar el ritmo a una tasa anualizada, con lo que se observa un crecimiento de 6,1%, el mayor desde diciembre de 2017, usando los datos desestacionalizados del trimestre. Este indicador se considera útil para identificar puntos de inflexión y medir el impulso que lleva la actividad económica.
“Estos resultados confirman un punto de giro en el ciclo de la actividad económica, al pasar de un proceso de desaceleración a uno de aceleración”, explicaron en un comunicado.
Christine Jenkins Tanzi
