Hermes Solano
Tras el despido de la ministra de Cultura, Nayuribe Guadamuz, el pasado viernes debido a la firma para declarar de interés cultural la Marcha del Orgullo, se mencionó que hubo influencia de Fabricio Alvarado y Nueva República en la decisión que tomó el presidente Rodrigo Chaves.
El mandatario negó que los neorepublicanos hayan tenido injerencia en esa decisión o en alguna otra que él haya tomado.
Ricardo Sossa, quien fue destituido el sábado del puesto de Comisionado de Inclusión Social por la misma razón que Guadamuz, no descartó a El Observador que la decisión se dio por presiones del diputado Alvarado.
“Esa noción de que Fabricio Alvarado tiene alguna influencia sobre las decisiones de Gobierno es absurda”, dijo este miércoles en conferencia de prensa.
Incluso, cuestionó que algunos altos dirigentes de la bancada legislativa se estén atribuyendo ser los gestores de esa decisión de quitar a la ministra.
“Me dicen, no sé, y le pido disculpas a don Fabricio si estoy levantando falso testimonio, que andan ciertos dirigentes de su fracción saludando con sombrero ajeno, diciendo a grupos evangélicos: “fue gracias a nosotros”. Nada que ver”, señaló Chaves, para dejar en claro su posición.
“No tuvieron ninguna injerencia, ni tendrán injerencia… son decisiones mías”, expresó.
Chaves asegura que no habla con el diputado Alvarado desde el momento cuando le dio el apoyo a Rodrigo Arias para la reelección a la presidencia; es decir, antes del 1 de mayo.
“Nada que ver don Fabricio en mi decisión de sacar a la ministra”, reafirmó.
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Rodrigo Chaves
¿Qué papel jugó el diputado?
El excomisionado de Inclusión Social relató que después de trascender su despido, recibió en su WhatsApp una serie de videos de Fabricio Alvarado y de la Alianza Evangélica Costarricense en los que criticaban la decisión de la declaratoria de interés cultural.
“Hubo presión política de Fabricio, diciendo que Rodrigo (Chaves) era débil en los valores de la familia”, destacó.
“Ahora me llama gente y me mandan cartas que ha publicado la asociación evangélica encabezada por Fabricio, dándole gracias al Presidente y que no declarara la actividad cultural.
“Y ahora veo una carta que me pasaron donde le agradece al Presidente haber quitado la declaratoria, lo cual es un acto ilegal, eso solo se puede hacer en jornadas laborales”, detalló Sossa.
Sobre este tema, Fabricio Alvarado criticó que Chaves lidera un gobierno “tibio en la defensa de los valores conservadores de la vida y la familia”.
Él destacó que la declaratoria se firmó desde el 18 de junio y que el sábado prácticamente se lavó las manos al decir que no tenía conocimiento.
La Alianza Evangélica publicó el domingo un agradecimiento a Chaves por su decisión de derogar la declaratoria de interés cultural.
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