Paula Ruiz
El polémico préstamo por $31 millones para remozar el Teatro Nacional está apuntado en la pizarra de discusión del primer debate en el plenario legislativo, y de momento se perfila como una votación dividida.
Anunciaron voto en contra diputados del Partido Unidad Socialcristiana (PUSC) y de Restauración Nacional, que suman a 16 diputados.
A favor de la iniciativa se sostienen las bancadas del Partido Liberación Nacional (PLN) y Partido Acción Ciudadana (PAC), a los que se les sumaría José María Villalta del Frente Amplio y legisladores del Partido Integración Nacional, que no llegan a 31 votos.
Con el apoyo de los diputados independientes cercanos al excandidato Fabricio Alvarado, el proyecto podría obtener, apenas, los 38 votos.
Para la aprobación en primer debate es necesario el voto de la mitad más uno de los legisladores, sin embargo, para el segundo debate se requieren al menos 38 votos.
El préstamo pretende solventar el riesgo eléctrico que podría provocar un incendio.
Ese rubro se presupuesta en $1,3 millones. Otras partidas se relacionan con $4 millones para un sistema contra incendios y $1,7 millones para la restauración. Esas partidas son intocables para los diputados.
Pero, sus principales opositores critican otras partidas como $8,2 millones para un nuevo edificio, $1,6 millones para un túnel, $4 millones para fiscalizar las obras y $10,2 millones para readecuación tecnológica.
¿Sólida oposición?
María Inés Solís, jefa de fracción de los socialcristianos, recordó que desde un inicio, la bancada se opuso al préstamo porque no es de recibo avalar ese crédito en la situación económica actual que enfrenta el país.
Incluso, los rojiazules habían solicitado a autoridades de Gobierno, renegociar el empréstito.
“Nos parece abusivo, cuando estamos en crisis y tenemos una familia con problemas económicos y tenemos que cambiar el sistema eléctrico de la casa, pedimos un préstamo para hacer ese cambio, pero no, para hacer piscina, rancho y ojalá una cancha de golf con palito y carros nuevos”, criticó Solís.
En la acera de Restauración Nacional, Eduardo Cruickshank jefe de fracción argumentó que aunque si bien, están de acuerdo con restaurar el inmueble, se oponen por algunas condiciones establecidas con el BCIE.
El proyecto de ley 20.810 fue analizado inicialmente en la Comisión de Ciencia, Tecnología y Educación donde los restauracionistas tenían como representante a la legisladora Mileidy Alvarado.
La congresista cuestionó aspectos como el monto pues solamente se requieren $6 millones para y las sanciones por pagar por adelantado, entre otros.
“Hoy en medio de la reunión de fracción, se tomó el acuerdo de votar en contra porque la diputada que ha venido al frente, nos ha hecho un informe completo sobre las razones para votar en contra”, sostuvo.
Aunque en pasillos legislativos se hablaba de que el bloque de independientes también votaría en contra, Jonathan Prendas, uno de los legisladores de este grupo lo desmintió.
Más bien, apuntó a que darán el aval con tal de evitar que se genere un incendio y luego, sean señalados como los responsables de no aprobar un crédito que pudo prevenirlo.
