Marco Marín
El paso por el puente del Saprissa, ubicado sobre el puente Virilla, tendrá un carril cerrado, la noche de este lunes, para continuar con los trabajos de colado de cemento sobre una de las pilas de la estructura.
Esto quiere decir que, entre las 9:00 p. m. de este lunes y hasta las 4:00 a. m. de este martes, el paso por este viaducto será regulado, para permitir a los trabajadores verter el material sobre una de las dos columnas de soporte.
El carril que va en sentido Santo Domingo-Tibás estará inhabilitado para ubicar la maquinaria que bombea el concreto dentro de la estructura, según confirmó el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi).
Por esta razón, las autoridades hacen un llamado a los conductores para que consideren el uso de vías alternas por Barrio Socorro, Moravia o San Miguel de Santo Domingo, para vehículos livianos. Para camiones, la entidad recomendó utilizar la ruta por San Isidro de Heredia.
Puente avanza
Los trabajos en esta obra iniciaron en marzo. El pasado 6 de noviembre, el Conavia cerró el paso para a la instalación de una estructura metálica que servirá de soporte para la construcción del tablero.
La estructura sirve como la base sobre la que irá la superficie de ruedo (los futuros carriles) del nuevo paso. Una vez que se tenga esta parte, comenzarán a construir lo que también llaman la superestructura.
Este proceso debe hacerse de forma proporcional. Esto implica que se deben construir tramos similares en ambas direcciones, de la pila al extremo y hacia el centro. “Es como una letra T”, explicó, a El Observador, uno de los encargados del proyecto, el ingeniero Oldemar Sagot.
Esta parte del nuevo viaducto se sostiene gracias a las columnas principales. Estas tienen una base que mide 15 metros de largo por 15 metros de ancho, y con una altura de cuatro metros y los cuales son parte del total de 50 metros de altura.
La obra consiste en un puente de 285 metros, hecho totalmente de concreto y varillas de más de tres pulgadas. Tiene un costo de ¢13.700 millones y que es financiada por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Esta nueva vía tendrá tres carriles, de 3,60 metros cada uno y contará con aceras de 1,5 metros. Por acá podrán viajar los conductores que se trasladan desde la provincia herediana hasta la josefina.
La obra debería de estar lista en setiembre del 2020, según lo establecido por el contrato. Según estimaciones del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), por esta carretera pasan a diario cerca de 34.000 vehículos.
Su ejecución está a cargo de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS). La construcción la realiza el Consorcio Virilla 32, compuesto por la empresa nacional MECO y la española Puentes y Calzadas.
Marco Marín
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