Razones para no dejar de entrenar en Navidad 

Aaron Conejo para El Observador

La Navidad, las vacaciones, las celebraciones, las grandes comidas y los encuentros frecuentes con amigos son muchas de las razones por las cuales en estas fechas muchas personas optan por dejar de hacer deporte.

Siendo diciembre el mes en que más se debería de mantener la disciplina de entrenar, vamos a ver porqué razones sucede lo contrario.

Algunas razones por las cuales se comete este gran error son las siguientes: 

En primer lugar, al comenzar diciembre muchas personas dejan de pagar la cuota del mes al gimnasio por el tradicional motivo de “hay muchos días festivos, así que es una perdida de dinero”. FALSO.

Los días festivos son sólamente el 25 y el 1. Los demás días son laborables y con amplio horario para poder ir con absoluta normalidad o aprovechar un rato libre o escapada (menos es más). Si dejamos de entrenar realmente perdemos dinero, ánimo y forma, pues luego costará el doble ponerse al día borrando las secuelas del diciembre.

En segundo lugar, durante la época navideña, comiendo “lo justo” se come mucho más: se ingieren mayores cantidades de platos grasos, salados y dulces, además de bebidas alcohólicas. Un exceso alimenticio que aporta mucha carga negativa, física y mental (sensación de culpabilidad) y que para colmo, obligará a estar más de un mes cuidándose y suplementandose para eliminarla. “Después de un gustazo un trancazo”.

En tercer lugar, el 90% de los planes de ejercicio van encaminados a la pérdida de peso; durante ests fechas se desvanece el esfuerzo que se hace durante el año”. La razón principal de dejar de hacer ejercicio en Navidad es “cometer excesos comiendo y bebiendo”; aún teniendo a conciencia que va a perjudicar en corto plazo”, echando así a perder lo logrado.

Otro motivo de la dejadez es la intención de posponerlo para el comienzo del próximo año: “Para ayudar a acallar la conciencia piensan que es mejor empezar definitivamente en enero, aprovechando así los propósitos de nuevo año”.

Pero, ¿cuáles beneficios trae entrenar en esta temporada?

Tanto en Navidad como en cualquier otra época del año se recomienda no dejar de entrenar.

El cuerpo no sabe de fechas y está hecho para moverse todo el tiempo. Al dejar de hacerlo podemos perder lo logrado, hasta incluso enfermar a largo o corto plazo.

La actividad física y, más concretamente el ejercicio es el único medicamento para tratar este problema (enfermedades por sedentarismo), no tiene efectos secundarios y no puede ser más costoso que someterse a tratamientos farmacéuticos por descuido.

Algunos grandes beneficios de entrenar son:

1. Mantener el hábito y la disciplina: continuar con ello es crucial para conseguir cualquier objetivo: ya sea mantener una buena salud, perder peso o no ganarlo, lograr terminar una carrera o alguna meta estética.
   
2. Mejor eficiencia metabólica: favorece la mejor distribución de los nutrientes, evitando una mayor acumulación de grasa.
   
3. Mejorar el balance calórico: el ejercicio es también un apoyo importante para tener un balance calórico consecuente con nuestros objetivos.

Aunque “el descanso es necesario para el cuerpo y es parte del propio entrenamiento, si va más allá de lo que se necesita, nuestro rendimiento disminuye y nuestra salud se ve perjudicada de manera progresiva. Todo ello conlleva el sedentarismo y la falta de ejercicio físico”. Los efectos son “directos, pudiendo empeorar física y emocionalmente nuestra calidad de vida”.

Es sumamente importante saber que el ejercicio no contrarresta los excesos. Hacer ejercicio tiene efectos positivos para nuestra salud pero no compensa los excesos.

Por ejemplo, en Navidad, una de las comidas típicas es el tamal. Un tamal promedio contiene, aproximadamente, 150 calorías por cada 100 gramos, y cada pieza pesa desde 350, hasta 500 gramos cuando se trata de la piña.

Lo que quiere decir que, si usted come un tamal completo y de buen tamaño, estará consumiendo alrededor de 650 calorías, dejando de lado la bebida y los complementos como café y otros, equivalentes a una hora de trote para compensarlo directamente. Esto indica que no podemos utilizar el ejercicio como herramienta directa para contrarrestar todos los excesos” .  

Consejos para no tirar la toalla en diciembre

• Realizar durante tres o cuatro días ejercicios de fuerza mezclados con ejercicios aeróbicos.
  
• Practique ejercicios a modo de circuito o intervalos.
  
• Intente hacer gran cantidad de repeticiones.
  
• En cada sesión intente durar aproximadamente una hora.
  
• Los ejercicios multiarticulares (moviendo una gran cantidad de músculos simultáneamente) son una excelente opción.

No olvide, nunca es tarde para empezar y si ya lo hizo no se detenga. Persevere y verá los resultados. 

¡Feliz Navidad!?