La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) hace un llamado a los costarricenses para que denuncien el robo de combustible o cualquier intento de sustracción en alguno de los 415 kilómetros de poliducto que van desde Moín (Limón) hasta Barranca en Puntarenas.
Pero, además, también solicita a la ciudadanía que se una en su lucha contra el transporte, almacenamiento o venta ilegal de combustible. La línea gratuita para denunciar es 1-0-0-2.
La entidad no solo muestra preocupación ante un delito que desangra las arcas públicas: desde el 2018 Recope reporta una pérdida anual cercana a los ¢2.000 millones por robo de combustible, principalmente diésel y jet.
Esto equivale a un promedio por año de 3.875 metros cúbicos de material que ha sido sustraído de manera ilegal.
Juan Manuel Quesada, presidente de Recope, también enfatizó en los enormes riesgos físicos a los que se exponen no solo quienes roban. También advirtió sobre las consecuencias que podrían experimentar las personas que residen cerca de los poliductos.
Puntos calientes
Quesada comentó que Recope destina importantes recursos en la atención de este delito: desde compra de equipos altamente especializados y sensibles para identificar robos hasta fugas en el poliducto.
Y es que los primeros reportes de robo de combustible se dieron en el 2016. Gracias al trabajo de inteligencia desarrollado por la entidad se han identificado los llamados puntos calientes:
- Limón-Siquirres
- Siquirres-Turrialba
- Turrialba-Cartago
- Y más recientemente Coyol de Alajuela
Desde el 2016, la institución ha reportado 1.145 tomas ilegales, de las cuales 118 se han descubierto en lo que va de este 2023, explicó Quesada. Es decir: cada dos días se descubre una de estas tomas.
Mayor sensibilización
El presidente ejecutivo de Recope apela a la sensibilización social sobre este tema e invita a los costarricenses a denunciar irregularidades cuando las vean o tengan conocimiento de ellas.
También agradece a las autoridades judiciales y policiales porque hay una mayor coordinación y entendimiento con respecto al robo de combustible. Sin embargo, a la fecha el número de las personas que han sido sentenciadas es muy bajo en relación con las denunciadas: solo 14 de un total de 606.
Estas personas estarían ligadas con algunas de las bandas criminales ya identificadas por Recope.
Quesada finalizó con la esperanza de que Costa Rica no registre un caso como el que ocurrió en México en el sector de Tlahuelilpan en el 2019. En aquel entonces la explosión en una toma ilegal causó la muerte de al menos 91 personas y más de 50 heridos.
El último caso
Este lunes de la semana pasada, Recope frenó el robo de 12.000 litros de combustible, ubicados en un furgón a pocos metros del peaje de Alajuela, sobre la autopista General Cañas.
El furgón transportaba 12 tanquetas con capacidad para 1.000 litros cada una.
El combustible era extraído de un poliducto. Trascendió que el conductor se dio a la fuga tras recibir órdenes de Fuerza Pública de detener su vehículo.
El costo de combustible incautado se estima en más de ¢7 millones.