Yaxún Víquez para El Observador
Siempre hay espacios en los que una necesita recordarse a sí misma lo mucho que vale.
Sentir que se “desarma” por dentro en algunos momentos ¡se vale! y se vale vivirlo, pero también es válido querer salir de ese lugar.
A veces conectar con la felicidad puede no parecer fácil ¿recuerda la película intensamente? la felicidad y la tristeza siempre juntas… Ambas emociones se valen, ambas pueden coexistir, menos juzgarnos, más validarnos para poder encontrar las herramientas sanas para salir adelante nosotras mismas.
Tome unos minutos hoy, haga una pausa, respire, dígase a sí misma que es valiente y siga… con mucho amor hacia usted… pero por favor…. ¡siga! y sin duda, revise su enfoque.
Sí, revisar ¿a qué le estoy poniendo atención?
- Estamos enfocado en lo que ¿podemos ganar o perder?
- Estamos enfocado ¿en el riesgo o en la oportunidad?
- Y por último… estamos enfocado en ¿lo que opinan los demás o en lo que realmente queremos hacer por el mundo?
¡Depende de nuestro enfoque!, así será entonces nuestro freno o nuestro impulso!
