Manuel Sancho
El Deportivo Saprissa vivió de la renta en su visita al estadio Cuscatlán de El Salvador, para enfrentar al Águila, por la vuelta de los octavos de final de la Liga de Concacaf. En un deslucido juego, los locales derrotaron 1-0 a los morados, pero no fue suficiente para la remontada.
Saprissa había ganado 2 por 0 en la ida el 21 de agosto. Como ha sido común en la era de Wálter Centeno, Saprissa fue un cuadro irregular, gris y con poca chispa. Apenas para aguantar 90 minutos ante un cuadro del Águila crudo y tosco.
Con Kevin Briceño, el Paté rotó en el marco. Arriba apostó a la artillería pesada que mejor resultados le ha dado: Randall Leal, Christian Bolaños y Johan Venegas, generando y abriendo; y el joven Manfred Ugalde en punta.
Aunque los tibaseños dominaron el juego, nunca consumaron su toque de pelota en el marco rival. Por momentos insípido, el Saprissa se dedicó a cuidar la ventaja y jugar con la desesperación del Águilas…que nunca llegó.
Los salvadoreños no se animaron a apretar arriba y subir líneas. El marcador en contra no los hizo buscar el marco rial. Aún así, a falta de 10 minutos para el final, Fernando Castillo puso el gol de la victoria, pero insufuciente.
Con cinco minutos de reposición, Saprissa vivió más angustia de lo esperado. La superioridad – en papel y en la práctica – nunca se reflejó en el marcador.
Con una desentonada derrota, confirmó la mayor probabilidad y avanzó a la siguiente ronda de la Liga Concacaf. En setiembre y octubre enfrentará al Independiente de Panamá.
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Manuel Sancho
