Rodrigo Díaz
Apenas habían pasado unas horas desde que sufrió el accidente en motocicleta que le hizo perder su pie izquierdo. Era un 25 de agosto de 2017, y ese día parecían esfumarse sus sueños de gloria deportiva.
Pero aún en el hospital, Sherman Guity dijo una frase que mostraría su carácter y espíritu de lucha: “Prometo que seré el mejor atleta paralímpico de Costa Rica”.
Se lo propuso y lo cumplió con creces. Este lunes, el limonense de 24 años se convirtió en el primer medallista costarricense en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020, al terminar segundo en la prueba de los 200 metros planos.
Un hito reservado para muy pocos. Y su leyenda podría crecer si se cumplen los pronósticos que le colocan una nueva medalla en su pecho, esta vez en los 400 metros planos. La semifinal se correrá el próximo viernes.
Impulso competitivo
Tal vez el impulso de decir que seguiría compitiendo menos de un día después del accidente es por su espíritu competitivo.
Sherman pertenece a una familia de atletas; sus hermanos corren tan bien como él y destacan a nivel nacional. Además, forma parte del equipo de atletismo en el que están Nery Brenes, Emmanuel Niño y Gerald Drummond, por solo citar unos ejemplos.
La alta competencia corre por sus venas y una situación como la que vivió no lo iba a frenar.
“Sherman es una persona relajada. Él no se queda sufriendo por el pasado o por el que dirán, sino que sigue al ritmo de su vida conforme las cosas se van dando”, afirmó su entrenador Emmanuel Chanto, quien desde Costa Rica sigue atento el desempeño de su pupilo.
Chanto fue uno de los primeros en llegar al lugar del accidente y desde ese lugar motivó a Sherman y le prometió que harían lo posible para que pudiera volver a competir. Y siempre ha estado ahí para impulsarlo a que no cese sus sueños.
Otra adversidad en el camino
La recuperación del atleta fue tan rápida que pocas semanas después del accidente ya estaba compitiendo. Y ya en 2019, menos de dos años después del suceso, competía ante lo más selecto del paraatletismo ganando 2 medallas de oro en el Grand Prix de Suiza.
Tan buena fue su actuación ese año que logró la marca para asistir a los Juegos Paralímpicos. Nada lo detenía.
Pero la adversidad parecía marcar su destino. Poco después se le detectó Clostebol, una sustancia prohibida, en un análisis antidopaje.
Aunque el atleta demostró que se debió al uso de un medicamento producto de la extracción de un queloide (tejido que se forma al cicatrizar una herida), se le sancionó con dos años fuera de las pistas.
“Fue una situación que no se esperaba, no tenía la malicia para pensar en esas cosas. A partir de esa sanción, Sherman se ha vuelto más cuidadoso, no solo en los alimentos que consume, sino en muchas cosas en su vida”, explicó Chanto.
Aún así, el joven no se echó para atrás y continuó entrenando. La idea era mantenerse activo, al lado de los mejores velocistas del país, para que su regreso a la competencia fuera menos difícil. Sin embargo, había incertidumbre en su futuro.
Y cuando todo parecía confabularse contra Sherman, vino el cambio de fecha de los Juegos Paralímpicos, para agosto de 2021, justo un mes después de cumplir la sanción.
Eso le permitió ponerse a punto y llegar a un buen nivel a la justa olímpica, en la que espera seguir brillando.
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Regocijo en la delegación
Sherman es querido entre la delegación olímpica que está en Tokio. Este lunes no hubo duda de ello, pues todos lo esperaban en las afueras del edificio de la vila para felicitarlo por su triunfo.
“¡Bien negro”, “¡linda mae!” y otras frases de apoyo lo recibieron. Y, desde luego, no podía faltar una porra a Costa Rica.
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Sherman Guity recibio el cariño de la delegación deportiva en Tokio (Cortesía CON)
Medalla histórica
El limonense logró el sueño de medalla este lunes en una final muy cerrada. Sherman estableció una marca de 10.78, mejorando el 10.88 que hizo en la semifinal.
Estuvo a solo dos centésimas del oro, obtenido por el alemán Félix Streng, con 10.76. El bronce fue compartido por el alemán Johannes Floors, y el británico Johnnie Peacock. Ambos hicieron un registro de 10.79.
El tico compitió en la categoría T64, la cual se refiere a los atletas que compiten en velocidad y tienen una amputación en la pierna.
Ahora, Guity deberá concentrarse para su siguiente participación, en los 200 metros planos, categoría T64.
Si bien muchos esperan lo mejor para Sherman, su propio entrenador Emmanuel Chanto prefiere reservarse los pronósticos.
Solo espera lo mejor para un joven a quien el futuro se abre de una forma brillante. Ya es el mejor paratleta de Costa Rica… ahora espera ser uno de los mejores del mundo.
Fotos y videos cortesía del Comité Olímpico Nacional
Rodrigo Díaz
