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Sistema de Banca para el Desarrollo: un total fracaso, una farsa

Carlos Peña para El Observador El Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) ha demostrado sistemáticamente ser un total fracaso,…

Por Desde la Columna

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Sistema de Banca para el Desarrollo: un total fracaso, una farsa
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Carlos Peña para El Observador

El Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) ha demostrado sistemáticamente ser un total fracaso, no ha podido generar buenos proyectos de capital semilla para la colectividad empresarial y, por medio de los operadores bancarios, no cumple la meta de poner a disposición los fondos necesarios para el desarrollo.

Los bancos y entidades colocadoras prefieren créditos personales e hipotecarios tradicionales antes que los del fondo de Sistema de Banca para el Desarrollo.

Si revisamos con cuidado quiénes son los actores principales de SBD y su actuar en la última administración del presidente Carlos Alvarado Quesada, podemos ver cómo estos fondos están acaparados por el sector industrial y el sector agropecuario bajo el mando de las cámaras empresariales representadas en la Junta Directiva del Sistema de Banca para el Desarrollo, concentrando gran cantidad de los fondos en agremiados de las cámaras ahí presentes.

Peor aún, en el año 2018 la Contraloría General de la República señaló con gran preocupación cómo es que la mayoría de los fondos invertidos por el Sistema de Banca para el Desarrollo se concentraba principalmente en un sector agrícola, que no cumplía con las expectativas legales que solicita la norma y que la mayoría de todos los créditos otorgados no contaban con la documentación y/o factibilidad financiera correspondiente.

Siendo que la realidad es esa, que el Sistema de Banca para el Desarrollo es una farsa y se encuentra secuestrada por ciertos grupos empresariales, corresponde a los empresarios buscar otras alternativas que analizaremos en esta y otra entrega.

La forma en la cual se presentan las alternativas pretende ser una receta que le permita a los lectores implementar y, con ello, ir descartando posibles fallas de su negocio con anticipación. En otras palabras, la búsqueda de financiamiento debe de ser el primer eslabón del proceso de análisis de si su negocio tiene sentido o no, recuerde, si va a fracasar que sea rápido y barato.

Según estudios en ventas, solo el 6% de los prospectos no tienen dinero disponible a la hora de comprarle; el resto de personas que rechaza una oportunidad de compra lo hacen porque no entienden qué es lo que se les ofrece o no comprenden los beneficios obtenidos del producto o servicio, en el caso de las inversiones es lo mismo.

Lo cuento como anécdota personal: iniciando la pandemia existía un gran temor global en materia económica, arraigado por el miedo de la crisis financiera y la incertidumbre de los mercados, en ese momento vi que existían oportunidades de negocio y busqué por diferentes medios personas que quisieran invertir en proyectos que les permitiera generar patrimonio, retornos y seguridad, así fue como he logrado levantar fondos más rápido que en otros años, aun estando a las puertas de una crisis económica.

Entonces, el paso primero es diseñar adecuadamente un perfil de proyecto; muchas personas que buscan financiamiento realmente no saben lo que quieren, no ofrecen nada (literalmente). Crear un plan de negocio detallado, sencillo de comprender y contundente en la propuesta de valor permitirá al prospecto entender qué es lo que se quiere de este y cómo invertir en el negocio.

Este plan de negocio debe de contener un lenguaje sencillo para que pueda ser entendido por cualquier persona, porque en mi experiencia las personas que uno menos cree que tienen liquidez para invertir a veces sorprenden. Además, incluya fotografías, videos explicativos y una tabla sencilla de retorno sobre la inversión, a la gente le encantan los números (aunque no los entiendan bien, igual les gusta verlos).

Para todo inversionista lo más importante es que le vendan seguridad, por lo que debe de quedar muy claro en toda su presentación que usted como persona es de confiar. Muestre experiencias pasadas, proyectos exitosos, pero por sobre todo explique algunos fracasos y cómo pudo sobrellevarlos, una persona que comente sus fracasos con propiedad demuestra experiencia y madurez.

Transmita en todo momento certeza, confianza y diligencia para que quienes le observen se permitan ver lo responsable que es usted y por ende sientan seguridad al invertirle. Si no le invierten en la primera presentación siga en contacto con estas personas, puede ser que en un futuro sí se interesen.

Cuando he hecho rondas de inversión para capital semilla de proyectos, propios y ajenos, siempre los inversionistas buscan que el emprendedor tenga mucha pasión por lo que hace, que se note que daría la vida por su proyecto. Un emprendedor que no se apasione por lo que hace no va a sacrificarse en absoluto por su empresa y por ende por sus socios.

También, los inversionistas se fijan en “qué pone el emprendedor”, busque que su aporte sea importante, ya sea en horas de trabajo, recursos o garantías, no presente proyectos en donde otros asuman todo el riesgo.

En segunda instancia fíjese que el proyecto tenga el valor correcto, muchas personas por pobres valuaciones pierden oportunidades de negocio importantes. Existen en el mercado algunos, pocos, asesores que saben cómo valuar empresas; también, podría revisar la literatura en línea sobre valuación de empresas y crear una metodología en su informe para justificar el precio de su negocio y cuanta inversión requiere.

Siendo así las formas de inversión alternativa en un proyecto son:

  1. Crowdfunding
  2. Préstamo privado
  3. Anticipos comerciales
  4. Factoreo
  5. Renting
  6. Crowdlending
  7. Venta de capital accionario

Este orden tiene un sentido, es ir generando un flujo de capital para su negocio sin tener que sacrificar lo más importante, la participación accionaria, porque esta es la forma más cara de financiarse ya que se está cediendo utilidades y control de la empresa.

En la siguiente entrega empezaremos a analizar en ese mismo orden cada una de las opciones de financiamiento.