La cadena de gimnasios Smart Fit apunta a una agresiva expansión en Costa Rica.
Desde su llegada aquí hace dos años, la empresa ha invertido $32 millones en la apertura de 16 locales.
Y espera abrir más locaciones en el corto plazo, aunque los sitios no fueron revelados por la empresa.
La más reciente es la sede -de 1.600 metros cuadrados- en Lincoln Plaza, en Moravia, en el lobby del parqueo 1.
Previamente la cadena abrió un gimnasio al costado norte de la Plaza de la Cultura, en San José centro.
Modelo de negocio
Yugled Maya, coordinador corporativo de Smart Fit, comentó a El Observador que la millonaria inversión de su representada en Costa Rica responde a la “maravillosa respuesta de la gente”.
Pero, además, al modelo de negocio de esta empresa.
A diferencia de otras cadenas de gimnasios o locales independientes en el país, Smart Fit ofrece precios “accesibles a muy alta calidad” -explicó Maya-, ubicaciones convenientes y de alto tráfico y no es intensiva en personal.
De hecho este grupo tiene una planilla de 160 empleados en Costa Rica.
“Somos la mejor opción para poner en forma el bienestar de un país y democratizar el fitness de alta calidad”, subrayó Maya.
Smart nació hace 13 años en Brasil y está presente en 14 países con más de 1.000 sedes, donde acuden más de 3 millones de clientes.
Entre los beneficios que el representante destacó es el hecho de que los usuarios pueden usar sin costo adicional cualquier sede en Costa Rica y en el resto de Latinoamérica.