Marco Marín
La mañana de este viernes, la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) autorizó a Millicom International Cellular S.A, la cual opera en Costa Rica bajo la marca Tigo, a comprar el capital social completo de la compañía Telefónica (Movistar), en Costa Rica.
La aprobación se da luego de meses en que la entidad llevó a cabo un estudio para determinar que la concentración de ambas empresas no afecta los mercados en los que se da. El pasado 20 de febrero las empresas anunciaron el inicio de acuerdos.
“No se desprenden indicios de la existencia de potenciales efectos anticompetitivos derivados de la adquisición del 100% del capital social de Telefónica CR por parte de Millicom”, de acuerdo con la resolución RCS-221-2019 del Consejo de la Sutel.
“La Sutel tiene la obligación de velar por el interés del usuario y garantizar la continuidad del servicio a los clientes de Movistar. Esperamos que esta operación comercial se traduzca en nuevas ofertas y servicios en beneficio del consumidor”, puntualizó el Gilbert Camacho, presidente de la entidad.
De esta forma, Millicom podrá incorporar a sus servicios paquetes de telefonía e Internet móvil para ampliar su portafolio de servicios el cual, hasta hoy, solamente incluía la oferta de televisión digital e Internet en hogares.
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Ambas partes fueron notificadas y ahora deberán ejecutar la cesión de acciones de los contratos de concesión de las frecuencias de espectro radioeléctrico ante el Ministerio de Ciencia Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt).
La medida no afectará a los actuales clientes de Movistar, de acuerdo con la Sutel.
Transacciones en Centroamérica
La noticia se da un día después de que la empresa española Telefónica, dueña de Movistar, completó la venta de sus activos en Panamá a la misma transnacional que adquirió las operaciones costarricenses.
Con el cierre de esa operación, Telefónica completó la venta de tres de sus operaciones en Centroamérica (Guatemala, Nicaragua y Panamá) por un precio conjunto de $1.356 millones.
El 16 de mayo se concretó la venta en Nicaragua y en enero la de Guatemala. Con el visto bueno de Costa Rica, El Salvador es el único país donde hace falta que las autoridades autoricen la compraventa.
Marco Marín
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