Desde la columna

Tigres, Lobos y Hienas: transformación social

Carlos Gallegos. Profesor en Lead University. En mi carrera como consultor he encontrado empresas que han decidido transformarse profundamente pasando…

Por Desde la Columna

Tiempo de Lectura: 2 minutos
Tigres, Lobos y Hienas: transformación social
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Carlos Gallegos. Profesor en Lead University.

En mi carrera como consultor he encontrado empresas que han decidido transformarse profundamente pasando de ser tigres a lobos.  Ambos animales feroces tienen comportamientos y estructuras sociales muy diferentes.

El tigre es un cazador solitario, vive normalmente aislado y caza en forma individual lo cual hace extraordinariamente bien. El tigre caza en la selva en su territorio o selva y cuando por circunstancias de deterioro o disminución de su territorio se ha visto forzado a invadir o entrar en otras , los encuentros con otros tigres son generalmente batallas mortales.

Los lobos, por otro lado, son animales grupales y con una estructura social compleja y muy bien desarrollada. En una manada de lobos,  los más viejos viajan de primeros pues ellos determinan el paso, es decir, el ritmo al que avanzan todos. Por viejos son astutos y conocedores.  En caso de una emboscada normalmente se sacrifican asegurando así la sobrevivencia de otros miembros más jóvenes.

Detrás de los viejos vienen unos machos fuertes , guerreros feroces que defienden al tesoro más preciado de la manada: las hembras fértiles y de quienes depende el futuro de toda la manada y quienes viajan inmediatamente después.

Ellas son seguidas por otra serie de machos fuertes dispuestos a defender las hembras y las crías a muerte.  Finalmente y algo atrasado, viene el macho alfa, el líder de la manada y quien desde la soledad domina el terreno, imprime confianza, y dirige a todos los demás. Los lobos también han aprendido a cazar en manada y lo hacen extraordinariamente bien.

Es fácil de entender por qué las empresas  y corporaciones tigres que encuentran que sus mercados ( selvas ) se han ido reduciendo y combinado con otras selvas o espacios, han pretendido convertirse en lobos y así poder atacar nuevos territorios.

El camino de la transformación

Esta transformación pasa por un doloroso camino de destrucción de egos, actitudes y egoísmos. Las técnicas de trabajo en equipo, colaboración y cooperación son parte de la transformación.

La transformación requiere, un liderazgo muy fuerte y una convicción inquebrantable de lograr el cambio.  Algunas veces los intentos de transformación salen mal o se dan mutaciones malévolas y terminan convertidos en hienas, animales carroñeros que si bien cazan en manada, lo hacen con un desorden y griterío espeluznante.

El ADN felino y toda su individualidad ha convertido a los tigres en un nuevo animal egoísta, buchón y gritón peleando entre la manada y pensando exclusivamente en su propio bienestar.

Viendo lo que está pasando en Costa Rica en los últimos años, no puedo más que hacer una similitud y concluir que también como sociedad nos hemos transformado de labriegos sencillos, trabajadores y buenos a hienas voraces, sindicalizadas e insatisfechas y egoístas que gritan, marchan  y matan para defender sus privilegios y gollerías.

De dónde saldrá el líder sensato, auténtico y bueno que nos haga retomar el camino y la confianza para terminar de transformarnos en los lobos solidarios que como sociedad queremos ser.