Paula Ruiz
El proyecto de ley 21.344 que pretende cerrar el Fondo Nacional de Becas (Fonabe) iniciará su camino en la Asamblea Legislativa, pese a haber sido presentado por el Gobierno de la República en abril anterior.
Como la iniciativa había sido planteada por el Poder Ejecutivo en abril durante periodo de sesiones ordinarias, el proyecto debía ser convocado a sesiones extraordinarias en agosto, o bien, ser puesto a despacho por algún legislador, según explicaron en el Departamento de la Secretaría del Directorio.
Ninguno de esos panoramas sucedió hasta el jueves de esta semana, cuando el socialcristiano Pablo Heriberto Abarca tomó la decisión de ponerlo a despacho.
La iniciativa fue planteada en abril, sin embargo, los proyectos nuevos presentados a partir del 1 de mayo de 2019, no deben ponerse a despacho.
Abarca lamentó que, durante estos meses, ninguno de los legisladores oficialistas haya hecho ese trámite necesario para el inicio de su discusión.
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Según consta en la página oficial de la Asamblea Legislativa , desde el 24 de abril anterior, el estudio inicial se le designó a la Comisión de Asuntos Sociales.
“Lamento que el Gobierno presente el proyecto y que ninguno de sus diputados lo ponga a despacho, me parece un descuido terrible, lo hago porque me parece un proyecto importante de alto calado para Costa Rica”, destacó.
Se intentó tener el criterio de alguno de los congresistas del Partido Acción Ciudadana (PAC), sin embargo, mediante su encargado de prensa, se informó que no se iban a referir al asunto.
¿Qué busca el proyecto?
La iniciativa pretende derogar la Ley que creó el Fondo Nacional de Becas el 11 de febrero de 1997. En la exposición de motivos, el Gobierno defiende que aunque no había duplicidad de funciones entre el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y Fonabe, sí estaban dedicados al mismo tema.
Por lo tanto, buscan que los encargados de esos fondos estén en manos del IMAS y el Ministerio de Educación Pública (MEP). Al cerrar Fonabe, aseguran que el ahorro anual sería de ¢1.500 millones, por menores gastos en alquileres, viáticos, equipos y personal.
Desde julio anterior, el IMAS se encarga de la asignación de becas de Fonabe, mediante el programa “Crecemos”. Durante la ejecución detectaron que 6.289 estudiantes recibían doble subsidio por parte del Estado, lo cual implicaba un sobregasto de ¢300 millones.
“Fonabe tenía problemas en la colocación y además, al haberse trasladado recursos, lo que hay que hacer es cerrarlo, que quede liquidándose los que están hoy ahí y que, una vez que se termine, se cierre”, defendió Abarca.
El interés del Poder Ejecutivo es que este proyecto se convierta en Ley de la República para que comience a regir a partir del 1 de enero de 2020.
Dentro de los Transitorios se establece que, los beneficiarios de Fonabe de los programas de necesidades especiales, conflicto social e indígenas de prescolar y primaria, continuarán recibiendo la asistencia hasta finalizar el ciclo de primera infancia, primaria o, por un período máximo de 5 años.
En el caso de quienes tienen el beneficio por los programas de postsecundaria y mérito personal, recibirán la compensación hasta finalizar el ciclo educativo correspondiente o por un período máximo de 5 años.
