Tomás Gómez
¿Cuál es el impacto de los casi 30.000 venezolanos que se han radicado en Costa Rica de forma permanente? Esa es la interrogante que intentaba descifrar un estudio internacional presentado el jueves y que recorrió temas que van desde el pago de impuestos hasta el tipo de trabajos que desarrolla este segmento de migrantes.
La estimación es que la nacionalidad venezolana ya se han consolidado como la segunda más recurrente entre el grupo inmigrante.
La medición, auspiciada por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Cámara de Empresarios Venezolanos en el Exterior (Cavex), así como las cooperaciones de Estados Unidos y Suecia, calculó que para 2022 el pago de impuestos de por consumo generó al Estado costarricense una cifra de $40.207.434.
En contraposición, apuntan que los venezolanos habrían consumido unos $20,5 millones en servicios de salud y $15,9 millones en educación pública, lo que resulta en un superávit.
El informe aduce también que de formalizarse más la diáspora venezolana, podría darse mayor recaudación.
“El impacto fiscal potencial alcanzaría la suma de $47.479.744, lo que representa el 0,38% del total de la recaudación fiscal en Costa Rica en el año 2022”, postula.
¿Cuánta plata reciben?
Según los hallazgos del documento, la población venezolana en el país se desarrolla principalmente en comercio. También en servicios profesionales, técnicos y de apoyo empresarial y financieros, seguidos del área de alimentación.
En total, el 55,8% está trabajando.
Sobre los salarios, sostienen que quienes están el sector informal rondan el ingreso de $453,5. La cifra sube a $1.203 entre quienes pasan al sector formal.
Estudios universitarios y San José y Heredia como segunda casa
El estudio se aprovechó para hacer una caracterización de la población venezolana en Costa Rica para comprender mejor sus elementos.
Destacó que las mujeres son mayoría, representando el 61,39% del grupo. Por edades, encabezan las personas de 40 a 49 años (30%), seguido de quienes están entre los 30 y 39 años (26%) y luego los de 50 a 59 años (22%).
Otro factor llamativo es que la mayoría -tres cuartas partes- llegan con estudios universitarios; contando incluso con maestrías y hasta doctorados. No obstante, solo el 33% logra posicionarse dentro de su profesión.
Finalmente anotan que hay un importante sector de la diáspora concentrada en San José, pero abarcan todo el país.
