Mariana Mena
El volcán Rincón de la Vieja está en una nueva fase de actividad, según consideran los expertos del Observatorio Vulcanológico y Sismológico (Ovsicori).
Desde el 25 de abril informaron de una alta energía sísmica en el macizo, pero, ¿esto qué significa y qué puede generar?
Según explicó el vulcanólogo Geoffroy Avard, existe mucha incertidumbre en lo que pueda ocurrir en los próximos días u horas.
“El volcán inició el 2024 con niveles bajos de energía sísmica. Pero a finales de abril subió a un nivel máximo en comparación con el año anterior, fue rápido y de manera exponencial”, indicó Avard.
“Por eso cuando se dio, la tendencia llamó mucho la atención y dijimos eso hay que comunicarlo porque el volcán está ahorita en una nueva fase con energía sísmica altísima”, agregó.
Varios panoramas
Luego de eso, el volcán para el 6 de mayo presentó una disminución de la actividad, sin embargo, los mínimos se quedan altos – en comparación con meses anteriores- y la tendencia es hacia el aumento.
“¿Si nos preguntan qué podría pasar? Quedamos en problemas porque hay varios panoramas. Puede ser que la energía disminuye y no pasa nada”, indicó.
“Pero al mismo tiempo, puede hacer una erupción mayor porque el nivel de energía si es muy alto, tenemos mucha incertidumbre y no queremos tampoco generar alarma en la población”, resaltó Avard.
Si se analiza la energía sísmica que ha registrado el volcán Rincón de la Vieja durante el último año, es en este 2024 que alcanzó los niveles más altos.
Durante el 2023 también se tuvo actividad sísmica alta, pero estaba relacionada con las erupciones constantes que estaba presentando el volcán.
Erupción del jueves 9 de mayo. (Foto Cortesía/Ovsicori).
Vigilancia
“Es una situación que nos preocupa. Hay que estar preparado por la posibilidad de un cambio en la actividad, pueden ser erupciones o salida de ceniza”, sumó.
También destacó que es posible que con la llegada de la lluvia se vuelva a un nivel más bajo de energía, sin embargo señala que el contexto global actual es mejor vigilar de una manera más atenta.
Este volcán tiene un sistema muy dinámico y las condiciones actuales pueden cambiar en forma rápida a corto o mediano plazo, destacó el Ovsicori.
Los vecinos del volcán reportaron un aumento en la caída de ceniza en las fincas cercanas al coloso desde el lunes. Para este jueves, se observaron pequeñas y frecuentes erupciones.
“Son fumarolas muy ricas en vapor de agua, gases y con cierto contenido de cenizas de manera continua. Los habitantes del sector de Gavilán, al oeste del volcán, reportaron la presencia de ceniza sobre la vegetación”, detalló María Martínez del Ovsicori.
Tanto en este volcán como en el Poás, lo que ha ocurrido en los últimos días es que la cantidad de agua subterránea ha disminuido mucho dentro de los edificios volcánicos.
“Al disminuir la cantidad de agua los sistemas hidrotermales se reducen en tamaño y los gases provenientes del magma pueden viajar más fácil desde el interior al ambiente”, apuntó Martínez.
Desde la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) se mantiene la alerta verde en las localidades de:
- Dos Ríos y Aguas Claras en Upala
- Mayorga, Cañas Dulces y Curubandé en Liberia
