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¿Y si leemos unos “Cuentos Rusos” este diciembre?

Silvia Solano para El Observador Estamos en una de las épocas más lindas del año; no sólo por los hermosos…

Por Desde la Columna

Tiempo de Lectura: 2 minutos
¿Y si leemos unos “Cuentos Rusos” este diciembre?
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Silvia Solano para El Observador

Estamos en una de las épocas más lindas del año; no sólo por los hermosos días con clima navideño que diciembre nos regala, sino porque además es una época de reuniones con seres queridos que algunas veces tenemos oportunidad de verlos sólo una vez por año.

El espíritu navideño se siente y vive en el ambiente. Desde los lugares de trabajo, en las familias que decoran sus casas, en los menús que ofrecen los restaurantes y cafés; permitiéndonos así vivir por completo la “Experiencia Navideña” que, al menos yo, espero ansiosa cada diciembre.

Antón Chéjov era un maestro de los cuentos. Sus relatos encierran historias de gente ordinaria, viviendo experiencias comunes del diario vivir, pero que vista desde la lupa de este gran escritor se convierten en verdaderas joyas.

En su libro “Cuentos Rusos” compuesto por 13 relatos cortos, el escritor nos lleva a vivir escenarios tan variados y folclóricos que cada uno de ellos encierra una gran historia.

Rusia es un país conocido por sus arraigadas tradiciones y su gran riqueza cultural. Parte de su idiosincrasia se ve reflejada en estos relatos cotidianos y fascinantes. Son historias de gente común que nos abren una ventana hacia las tradiciones y cultura de un país bastante diferente al nuestro.

Con el fino humor con el Antón desarrolló cada historia y las lecciones de vida que ellas encierran, el escritor logra relatos extraordinarios, dignos de un maestro.

Por ejemplo, en el cuento “Una noche de miedo“, Chéjov escribió:

“No se puede prescindir ni retrasar la muerte; pero, a pesar de todo, es una idea que nuestra naturaleza repele”

Las simpáticas historias que se desarrollan en cada relato son la mejor compañía para mantener la energía de esta época. Hay una frase que me encanta donde el autor hace esta exquisita descripción, se encuentra en el cuento que llamó “Vanka“: 

“Las estrellas desparramadas por todo el cielo titilan alegremente y la Vía Láctea aparece tan nítida, como si la hubieran lavado y limpiado con nieve para la fiesta”

Leer uno de sus cuentos por día hasta que este 2019 acabe, será un excelente alimento para el espíritu y una linda forma de crear una nueva tradición.

¡Que pasen una Navidad feliz y muy llena de amor!

Silvia Solano,  es amante de la literatura, los viajes y las buenas historias. Blog: https://silabril.wordpress.com