La Contraloría General de la República se mostró a favor del proyecto de ley sobre renta global dual que se tramita en la Asamblea Legislativa.
Bernal Aragón, subcontralor general, estuvo en audiencia el miércoles en la Comisión de Asuntos Hacendarios donde se estudia la propuesta impulsada por el Gobierno.
Resaltó que la iniciativa permite avanzar en los criterios de equidad, simplicidad y factibilidad del sistema.
No obstante, Aragón hizo la observación de que se requiere un mejor control para evitar la evasión sobre este tributo principalmente por actividades lucrativas.
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La iniciativa que se tramita mediante el expediente 22.393 está basada en el individuo y pretende homologar el tratamiento de las rentas del trabajo en relación de dependencia y las rentas de las personas físicas con actividad lucrativa.
Uno de los aspectos más llamativos es que reduce la base de exoneración del impuesto de renta porque recaerá sobre quienes tengan ingresos anuales iguales o superiores a ¢8,2 millones es decir, ¢683.000 por mes.
Sin embargo, en setiembre, el Gobierno presentó una moción para que el gravamen empiece a regir a partir de ¢8,425.000 es decir, de ¢703.000 mensuales. Aunque, aún esta propuesta no ha sido aprobada.
Los legisladores más críticos durante la audiencia fueron el republicano Otto Roberto Vargas y el restauracionista Eduardo Cruickshank.
El primero de ellos, apuntó a que con esta iniciativa no se generan nuevos trabajos, no mejora la economía y tampoco reduce la desigualdad social.
Nuevo impuesto
Por su parte, Cruickshank, indicó que el plan introduce el impuesto de renta a personas que hoy en día no lo pagan.
Uno de los cuestionamientos del restauracionista hacia Aragón tuvo que ver con que si esta iniciativa es un nuevo gravamen.
Aquí se enfrascaron en intervenciones porque el subcontralor lo denominó como una “contribución” lo cual desagradó a Cruickshank.
“No estamos en contra de globalizar los ingresos, pero están camuflando dentro de esa supuesta globalidad los salarios únicos, que no se pueden globalizar porque la persona lo que tiene es un único salario, y a ese único salario le están disminuyendo la base para que a partir de ¢685.000 empiecen a pagar y eso, ciertamente, es un nuevo impuesto”, recalcó Cruickshank.
Debido a esto, anunció que esta iniciativa no contará con los seis votos de la bancada de Restauración Nacional.
Según el Ministerio de Hacienda, este proyecto tiene un rendimiento esperado de 0,43% del Producto Interno Bruto (PIB).
Esta es una de las iniciativas negociadas dentro del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).