Tomás Gómez
Fabricio Alvarado (Izq) y Jonathan Prendas comparecieron hoy ante la comisión legislativa (Foto Tomás Gómez)
Este lunes le tocó a Nueva República dar explicaciones sobre la campaña en la Comisión Investigadora de las Finanzas Partidarias y lo hizo mediante Fabricio Alvarado y Jonathan Prendas.
El detalle estuvo en que Alvarado es miembro del propio grupo investigador.
Prendas, por su parte, renunció al partido en abril y más bien trabaja en la formación de una nueva aprupación (Gran Alianza Nacional Republicana).
Fue Alvarado quien tomó la palabra a nombre de los dos para defender la gestión de la última contienda.
Inicialmente alegó que en su rol de candidato no se relacionó con todas las decisiones.
”No estuve directamente involucrado con la parte financiera”, dijo.
Eso sí, dijo que “el objetivo era ganar las elecciones”.Luego fue más allá y sumó que “como el objetivo era ganar la presidencia queríamos una campaña totalmente limpia”.
A eso sumó que ellos esperan que se avance en una reforma al sistema de financiamiento de los partidos políticos que modernice el sistema, sobre todo en cuanto a acceso de recursos en bancos públicos.
De paso alegó que se debe tener cuidado de cómo se estudia el tema de campañas para no terminar con un efecto adverso.
“Más allá de la importancia de la investigación política de este asunto es esencial no convertir este tema en una “cacería de brujas” permanente porque el efecto a largo plazo en nuestra democracia ya es preocupante”, cerró.
PUSC
Sumado a Nueva República, este lunes estuvo llamada Rosibel Ramos, exsecretaria general de la Unidad Social Cristiana.
Su intervención se limitó a explicar cómo funciona la logística de su partido el día de las elecciones. Ello abarcó temas de transportes, alimentación y hasta de las camisetas para las votaciones.
Sobre su labor, defendió que el partido ha buscado sistemas de control para el manejo de recursos. Esto incluía declaraciones juradas y revisión de los servicios contratados, como el monitoreo de los vehículos que movilizaban votantes.
También explicó como en el día a día, las regulaciones del Tribunal Supremo de Elecciones van marcando el trabajo que se hace desde una campaña y que, en teoría, se conocen todas las reglas.
“Las directrices o las pautas están muy claras con respecto a lo que se puede y no se puede hacer. En lo personal considero que es muy difícil lograr hacer cosas indebidas”, adujo.
De paso, defendió que los candidatos en su partido no tuvieron margen para aprovechar ganancias con bonos pues el financiamiento se usó directamente para cancelar obligaciones con los bancos que dieron financiamiento a su agrupación.
“Lo que nos hemos acostumbrado siempre es a hacer donaciones. Donaciones que queden bien claritas en el Tribunal”, manifestó.
