Tomás Gómez
¿Cómo se siente una persona que está a punto de dejar el trabajo donde permaneció por más de tres décadas? En el caso de Johnny Araya la combinación es de nostalgia, satisfacción y con algunos pendientes que achaca a la Contraloría General de la República.
“Siento nostalgia de dejar la Alcaldía, de dejar un proyecto que para mi ha sido apasionante. El proyecto de modernizar la Ciudad de San José, de convertirla en una ciudad más humana, más funcional, más competitiva”, dijo el político al ser consultado por la cercanía del 1° de mayo, cuando hará traspado de poderes a su sucesor.
“Yo he trabajado con mucha pasión por todo esto y separarme de este gran proyecto y separarme de una institución que quiero tanto y de muchos funcionarios con los que he convivido por tantísismos años obviamente que me produce un sentimiento de nostalgia”, sumó.
No obstante, defiende que se va ganando.
“También me voy con mucha satisfacción, porque el balance de lo que ha sido mi gestión es altamente positivo”, dijo.
Fechas para la memoria
Tras más de 30 años como alcalde, hay momentos que siguen marcando a Araya.
En lo bueno enlista una amplia lista de eventos relacionados con tradiciones y con obras.
“Yo no diría que haya un mejor momento. Han habido muchos momentos buenos”, alega.
“Cada Festival de la Luz es un gran momento, cada festival Transitarte ha sido un gran momento. Cada vez que inauguro un parque es un gran momento, o inauguré un boulevar peatonal es un gran momento”, sumó, destacando también la generación de la Policía Municipal.
En cuanto a lo malo sí es directo y señala al Caso Diamante.
“Obviamente el peor momento que he vivido fue cuando hubo el allanamiento de mi casa. Realmente una intervención provocada para hacer un gran escándalo precisamente a pocas semanas de una eleccion presidencial en Costa Rica”, comentó.
De ese caso, que data del 2021, reclamó que aún no le contestan nisiquiera los primeros reclamos.
El agrónomo que comandó la Capital
Aunque por décadas a Araya se relacionó con la política, su formación base es como Ingeniero Agrónomo.
Llegó a la política de la mano de un partido de izquierda ahora desaparecido, que se llamó Movimiento Revolucionario del Pueblo. Con él, fue regidor de la capital entre 1982 y 1986.
Volvió al ayuntamiento en 1991, ahora para ocupar el cargo que entonces se llamaba “Ejecutivo Municipal”. El cargo se convirtió en lo que ahora son las Alcadías de elección popular, donde las urnas siempre lo favorecieron:
- 2002: ganó con el 36,4%
- 2006: subió al 68,9% de apoyo
- 2010: se mantuvo con 61,2%
- 2016: alcanzó el 40%
- 2020: logró el quinto período con 37,7%
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En el intermedio estuvieron un par de coqueteos con la Presidencia de la República.
En 2009 fue precandidato pero en la convención interna le ganó Laura Chinchilla y para 2014 sí llegó a la papeleta. No obstante, en medio de un panorama complicado optó por el retiro y abrió las puertas al primer gobierno del PAC.
Ahora que sale del cargo, asegura que seguirá vinculado con la política, pues le embargan preocupaciones por el país y por su partido, Liberación Nacional.
