Visión País

A pesar de restricción vehicular, uso de autobús público cayó un 62% durante pandemia, según Aresep

por Marco Marín
Observador CR

Cerca de dos de cada tres personas (61,9%) consultadas por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) afirma que disminuyó la frecuencia con la que utilizaba el servicio de autobuses públicos durante el 2020. Esto debido a la pandemia por covid-19.

Así lo confirmó una reciente encuesta realizada por la institución a un total de 2.301 personas, entre el 26 de octubre y el 16 de noviembre, distribuidas a lo largo del territorio nacional.

De hecho, solamente un 5,3% de los casos reportó un incremento en el uso de este medio de transportes, mientras que el 32,3% restante consideró que no varió mucho su volumen de viajes.

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Razón principal

Si bien la intención original de la encuesta era medir el nivel de satisfacción de este servicio, entre los usuarios, los resultados arrojaron algunos hallazgos interesantes.

Por ejemplo, si bien el 61.9% de las personas aceptaron que recurrieron menos a esta forma de transporte ese dato, en zonas urbanas, ascienda al 66%, según el ente regulador.

¿La razón principal? Un 62% de las personas afirmaron tener a disposición un automóvil. Aunado a esto, un 30% de los usuarios experimentó problemas de disponibilidad de servicio, durante los últimos seis meses.(abril-mayo a octubre-noviembre).

Además, en los tres meses previos a la consulta, un 44% reportó atrasos en las llegadas de las unidades a las respectivas paradas.

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Por otro lado, tres de cada cuatro usuarios afirmó que sólo se monta a un bus para llegar a su destino más frecuente. Ese número se reduce significativamente a medida que aumenta el número de unidades requeridas para el viaje.

Polémica restricción

Los hallazgos de la encuesta de Aresep son validados por las cifras del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), del año pasado. El Observador reportó, el pasado 12 de noviembre, que en algunos momentos de la pandemia se llegaron a registrar hasta 500 partes por conductores que violaron la medidas.

De hecho, la medida llevó a Cosevi al borde del colapso pues solo, a setiembre, habían 25.000 casos acumulados, reportó la institución. Dichas cifras llegaron a bajar a cerca de siete por día durante el penúltimo mes del 2020.

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Desde su inicio, la restricción fue objeto de recursos de amparo. Incluso un grupo de alcaldes presentó un reclamo que incluyó la solicitud de medidas cautelares, pretendiendo un levantamiento temporal del impedimento de circulación.

A pesar de que el juez, Alcevith Godínez, consideró que la medida reclamada debía levantarse, la Procuraduría General de la República presentó una apelación que se trajo abajo la decisión de Gódinez, el pasado 20 de enero.

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A pesar de que el Gobierno insiste en que la medida ayudó a mantener despejados los centros médicos, evitando víctimas potenciales por accidentes de tránsito, nunca ofreció un criterio científico para argumentar dicha posición.

Esa contracción se mantuvo, el viernes pasado, cuando las autoridades del Ministerio de Salud afirmaron que no tenían una explicación ante las reducciones en la tasa de reproducción y en la cantidad de casos de covid-19 en el país.