Hermes Solano
Bryan Ruiz está viviendo con intensidad su despedida del fútbol profesional y sobre todo disfrutando.
El volante jugó la primera parte con el Twente, usando la camiseta 10 y portando la cinta de capitán.
Antes del encuentro, el equipo europeo le entregó un reconocimiento al jugador tico, que es toda una figura, ya que fue clave en la obtención del primer título en la historia del club, en aquella temporada 2009-2010.
Como en su mejor momento con el conjunto de Países Bajos, Bryan mandó la pelota al fondo de las redes, abriendo la cuenta en el partido.
El 10 recibió un servicio en los linderos del área y no dudó en rematar de seguido, abajo y pegado al vertical para vencer a Miguel Ajú.
Iban apenas 2 minutos de partido y en medio de la celebración, el jugador pidió disculpas a la afición. Y es que así estaba programado, jugar la primera parte con el conjunto europeo y la segunda con la Liga.
Más allá del gol, Bryan quiso lucirse con taquitos, jugadas de primer nivel.
Con un Morera Soto a reventar, incluida la familia del jugador en las gradas, la fiesta era total.
Al minuto 10 se desplegó un mosaico en las gradas, con pancartas en honor a Bryan. La tarde sabatina era toda para él, en medio de lo competitivo que era el encuentro en la primera mitad.
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Apareció Manfred
En el partido estaba Manfred Ugalde, el exdelantero del Saprissa y quien forma parte del conjunto europeo.
Ugalde se hizo presente en la red con el 2 a 0 al 15’, al definir dentro del área.
Los silbidos no hicieron esperar de parte de los manudos para el exjugador del archirrival. Sin embargo, eso solo fue un elemento en una tarde dedicada a Bryan, que cerrará su carrera con la rojinegra.
La Liga no quiso quedarse atrás y en el cierre de la etapa inicial descontó en el marcador, con gol de Johan Venegas.
En el segundo tiempo, Bryan dirá adiós con sus compañeros, algunos exjugadores como Wilmer López y Álvaro Saborío y su hijo Matías Ruiz.
