Generación de energía e impuesto a combustibles dividieron a candidatos presidenciales en conversatorio con industriales

El impuesto a los combustibles y la generación de energía fueron los temas en los que hubo mayores discrepancias entre cinco candidatos presidenciales, durante un conversatorio en la Cámara de Industrias.

Otro tema en el que sí hubo consenso fue la eliminación del monto mínimo de contribución que deben hacer los trabajadores independientes. Esto con el fin de reactivar la recaudación de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) e incentivar la formalización de las micro, pequeñas y medianas empresas.

El evento, organizado por la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), tenía como objetivo conocer las propuestas de los aspirantes para solucionar los principales obstáculos de competitividad que aquejan al país.

Esto, como resultado, ha impactado el desempleo y la economía del país. Precisamente, estas son las dos principales causas de preocupación entre los costarricenses. Así lo confirmó una reciente encuesta hecha por la firma Demoscopía, en exclusiva para El Observador.

El evento contó con la participación de:

• José María Figueres, del Partido Liberación Nacional (PLN)
• Fabricio Alvarado, Partido Nueva República (NR)
• Natalia Díaz, Partido Unidos Podemos (UP)
• Rodrigo Chaves, Partido Progreso Social Democrático (PPSD)
• Federico Malavassi, Partido Unión Liberal (PUL)

Si bien la candidata por el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Linneth Saborío, fue anunciada como una de las participantes, finalmente no participó.

Informalidad, el gran problema

Al cierre del primer trimestre de este año, el empleo informal era del 46,6%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

En ese sentido, los cinco aspirantes se mostraron a favor de atacar el tema, principalmente por medio de mejoras a la estructura de cobro de las cargas sociales. Para ello, todos respaldaron la eliminación del monto mínimo que los trabajadores independientes deben cotizar a la CCSS.

Aunado a eso, Alvarado, Chaves, Díaz y Malavassi afirmaron que respaldarían una reducción en los tiempos de prescripción para los pagos retroactivos que los emprendedores deben realizar cuando buscan formalizar su situación.

Mientras tanto, Figueres fue más allá y afirmó que apoyaría una moratoria para este sector. “Yo estoy a favor de una amnistía. Lo que importa es lo que haga el trabajador a partir de ahora y a futuro”, afirmó el exmandatario.

“Pero, hay que ir más allá.  En este país tenemos que rebalancear las cargas sociales”, añadió.

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Combustibles y energía

El tema en el que sí surgieron discrepancias fue alrededor de la generación de energía en el país, así como el costo de los combustibles en territorio nacional.

En esa línea, tanto Díaz como Malavassi apoyaron la apertura del monopolio que ostentan tanto el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) como la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).

Por su parte, Chaves hizo énfasis en la aplicación total de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF). Para el aspirante de los republicanos, la “pésima administración” de la entidad ha desembocado en tarifas que son casi del doble, añadió.

Aunado a esto, externó la importancia de que el país exporte la sobreproducción de energía. De esta forma, hizo eco de las palabras de Alvarado quien se mostró a favor de apoyar la generación de productores privados y la venta de sus servicios al mercado internacional.

Por su parte, Figueres se mostró más partidario de la revaluación de los activos pasivos del ICE cómo una solucion a los problemas financieros de la entidad.

Otro tema que generó enfrentamiento fue la posible eliminación del impuesto único de combustibles. Mientras que Alvarado, Díaz y Malavassi respaldaron la idea de deshacerse de este tributo tanto Chaves como Figueres manifestaron su oposición pero por razones diferentes.

El economista explicó que antes de apoyar esta medida es imperativo revisar los números para ver dónde está el impacto en la recaudación fiscal. Mientras tanto, Figueres afirmó que se opone al aumento de los tributos actuales. No obstante, añadió que se opone a una baja con el fin de no acrecentar el déficit fiscal. El exmandatario (1994-1998) explicó que apoyaría su eliminación si se logra identificar una alternativa que no afecte el ingreso de Hacienda.