Hermes Solano
Desde hace varias semanas, cientos de personas, principalmente venezolanos, están llegando a Costa Rica como parte del tránsito rumbo a los Estados Unidos.
Muchos de ellos están pidiendo dinero en varias de las provincias del país o vendiendo diferentes tipos de cosas en las esquinas, junto a sus familias.
Por eso, el Gobierno, en conjunto con la Dirección Nacional de Migración y Extranjería, idearon un plan para agilizar el tránsito de estas personas y que salgan lo más rápido posible del país.
Según la información desde Migración, en los próximos días estarían ingresando al país, por la frontera en Paso Canoas, más de 3.700 personas.
“Queremos garantizar que estas personas circulen por el país de forma más rápida, evitando que los centros de población se vean inundados por ese 10% que no tienen el dinero para seguir avanzando”, dijo Marlen Luna, viceministra de Gobernación y directora de Migración.
Las autoridades indican que en las últimas semanas el flujo de migrantes ha sido de entre 2.000 y 2.500 personas. Ahora con el aumento, buscan evitar que se concentren en el país.
Migración asegura que el 90% de las personas que ingresan al país tarda entre 24 y 48 horas en salir, pero el 10% se está quedando más tiempo, pues no cuentan con los recursos para seguir su camino.
Por eso harán un acompañamiento con todas las personas y las atenderán en albergues, para que no les falte alimento y también darles atención en salud, con la intención de que sigan su camino lo más rápido posible.
Sin estimularlas
Según el presidente Rodrigo Chaves, la idea no es estimular que se queden en Costa Rica, pero sí cumplir con las obligaciones internacionales sobre los derechos humanos.
“No estamos estimulando que se queden aquí, los vamos a dejar pasar, ayudarlos como nos obligan los convenios internacionales en temas humanitarios”, mencionó.
El plan contará con el apoyo del PANI, Ministerio de Salud, CCSS, Fuerza Pública, Inamu, MOPT, CNE, Tránsito y municipalidades.
Miles de venezolanos están tomando la decisión de salir de su país con rumbo a Norteamérica, en busca del sueño americano.
Los migrantes cruzan el Darién con rumbo a Panamá y de ahí entrar a Costa Rica, para seguir su rumbo hacia Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala.
