Tomás Gómez
¿Cómo le gustaría a la familia de Marco Calzada que se recuerde el legado que dejó su hijo durante sus 19 años de vida?
Esa fue una de las preguntas que contestó Mario Calzada, papá del joven fallecido, tras el arranque del segundo juicio por la muerte de su hijo acontecida hace un año en San José.
En ese punto, el hombre cambia el semblante y rememora como un jóven “común y corriente” puede entregarse al bien, ser un modelo de ejemplo y aportar a la sociedad.
“Es un ejemplo, es un orgullo para mi cómo papá ver el fruto que dio y que sigue dando después del paso a la vida eterna”, relató.
De manera reiterada habló también del apoyo que han recibido para sobrellevar el dolo.
“Ha sido un año tormentoso, difícil de afrontar pero con la mano de Dios y de la familia también vamos para adelante”, adujo.
Rezar por los demás
Desde la fe, la familia Calzada enfrenta el reto de sentarse por segunda vez en una sala de juicios donde se castigaría a los sospechosos de la muerte de hijo.
El año pasado tres menores de edad fueron sentenciados a medidas por el hecho y estaba pendiente juzgar a los mayores de 18 años que también participaron. Dicho proceso arrancó la semana anterior en los Tribunales de San José y ha implicado que dolientes y acusados queden cara a cara, con el reto de esperar a que la Justicia actúe.
“Un paso más, un momento muy difícil para nosotros, pero llenos de fe y esperanza de que esto salga por buen camino”, dijo el papá.
“No me toca a mi juzgarlos, no me toca a mi emitir un criterio sobre ese tipo de acciones. La verdad, no me aporta, no dejamos que esto nos afecte”, sumó.
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Sobre la experiencia, definió como “sumamente duro ver las declaraciones”; a la vez que agradeció la valentía de los testigos y reiteró la preocupación por los involucrados.
“Nosotros seguimos rezando por los muchachos para que se conviertan”, cerró.
Casos que desnudan a la sociedad
En su intervención, la familia Calzada se solidarizó con todas las demás que han sido víctimas de la ola de violencia del país.
“Son muchos asesinatos, somos otros dolientes más de esta situación tan difícil que está pasando”, dijo don Mario. “Acompañamos a todos los que están pasando pro esto también”, adicionó.
Desde su análisis, hay razones más profundas para el escenario al que se ha llegado.
“Que se logre ver muchas cosas que están pasando en el país que la sociedad tiene que tomar en cuenta para un futuro mejor en nuestros jóvenes”, describió.
A su vez, comentó las realidades en las que están las jóvenes involucrados en los problemas con la ley.
“Creemos que hay algo más allá, es un tema social, es un tema muy fuerte, va con el entorno donde ellos crecen, es parte de su día a día, de su vida, de su grupo de amigos, de su entorno, no tenerle miedo a la justicia, no tener miedo a lo que están afrontando.”, sostuvo.
Fechas de vida y dolor
Marco Calzada cumplía años el 28 de junio. Esa fecha era que celebraba la noche del 2 de julio del 2022, cuando un asalto devino luego en varias puñaladas que le cobraron la vida al joven que acaba de cumplir 19 años.
Un año después, justo en las mismas fechas, se está desarrollando el juicio.
Ante el tribunal, precisamente, tanto don Mario como doña Gabriela Valverde, mamá de Marco, dieron el testimonio de los días previos a la muerte de su hijo.
Recordaron como había pasado días preparándose para un examen universitario de cálculo y como el propio sábado de la tragedia destinó largas horas a completar la prueba virtual.
Tras ello contó cómo salió a celebrar su cumpleaños y como luego empezó la preocupación por el paradero de su hijo.
Según contó el padre, en la computadora quedó abierto el WhatsApp, por lo que fueron viendo los mensaje de los amigos que le preguntaban por su paradero. Una vez desaparecido su hijo comenzaron la búsqueda hasta tener la noticia fatal.
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Dentro de los últimos mensajes que tuvo el teléfono de Marco estuvo uno de su mamá donde le preguntaba si tendría que despertarlo al día siguiente para participar de una misa.
En vez de ello, lo que le tocó a la familia fue buscar a su hijo y luego completar los trámites de reconocimiento en la Medicatura Forense.
Ese momento fue recordado con especial dolor en el juicio. Ella lo definió como “desgarrador”.
Tras la primera jornada, el juicio se interrumpió para retomarlo el miércoles. La Fiscalía insiste en los hechos configuraron un homicidio y un robo calificado.
