El 2019 cerró con 14.000 casos de fraudes y estafas electrónicas. Y en lo que va del 2020 para fines de octubre se habían superado los 13.250.
La amenaza creciente en medio de la digitalización por la pandemia enciende alertas y generó una campaña público-privada para prevenir este delito.
Cámara de Bancos, Fiscalía, OIJ y Ministerio de Seguridad trabajarán con “Casi-timo”, un personaje con las características de los estafadores.
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Según las instituciones es urgente que las personas eviten dar todo de información pues esa es la principal vía para las estafas electrónicas.
“La única manera de detenerlos es no dando información”, dijo la Fiscal General, Emilia Navas.
Bernardo Alfaro, presidente de la Cámara de Bancos, agregó que la campaña tendrá también componentes para poblaciones como niños y adultos mayores.
Además, las instituciones financieras tendrán una nueva comisión de seguridad para atender amenazas electrónicas.
Bono Proteger en la mira
Según el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Wálter Espinoza, los grupos dedicados a los delitos electrónicos aprovechan coyunturas específicas para abordar a más población.
Como ejemplo de ello citó el Bono Proteger o las nuevas políticas del Ministerio de Hacienda, de las que se han valido los delincuentes para captar datos sensibles.
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La fiscal Navas agregó que elementos culturales como la confianza ponen a la población en condición vulnerable ante estos delitos.
“Los criminales son muy astutos, saben cuándo llamar y qué decir”, explicó.
Navas agregó que por su modalidad, las estafas electrónicas complican la recuperación de los dineros.