Todo Política

“No se puede cumplir, es imposible”, afirma ministro de Hacienda sobre 8% del PIB para educación

por Paula Ruiz
Observador CR

Para el 2024, el Gobierno presupuestó ¢2,6 billones para educación, que son el 20,6% del Presupuesto Nacional para el 2024, el cual asciende a ¢12,63 billones.

No obstante, el monto está lejano al 8% del Producto Interno Bruto (PIB) que está estipulado en la Constitución Política y representa aproximadamente el 5,6% del PIB, incluyendo los recursos para red de cuido y el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA).

La Procuraduría General de la República (PGR) estimó que para el 2023, debía cumplirse con tal mandato y que, eso significarían alrededor de ¢3,7 billones lo cual supondría un monto similar para el próximo año.

“No se puede cumplir, es imposible en las condiciones actuales”, reconoció Nogui Acosta, ministro de Hacienda.

“Porque tendríamos que quitárselo a alguien y usted vio la reacción de los diputados cuando dijimos que íbamos asignar recursos”, agregó.

El titular de Hacienda, destacó que los ¢12,63 billones presupuestados, es lo máximo que se puede financiar vía ingresos y gasto.

Uno de los puntos que cuestionó el jerarca tiene que ver con que es un presupuesto abultado, pero los resultados no son los esperables.

“Los resultados de PISA son cada vez peores, tenemos presupuesto alto y los resultados son malos”, señaló.

Confesó que el presupuesto para educación podrá incrementarse en mayor medida, cuando se logre disminuir la relación deuda-PIB dado que eso permitirá disminuir el peso de los intereses en el gasto.

Para este 2023, se presentó el presupuesto en educación más bajo desde 2011, año en que se promulgó la Ley que obliga al Estado a cumplir con el 8% del PIB en educación, pues se fijó en 5,3% del PIB.

En comparación con el del año en curso, hay un aumento para el 2024 de ¢74.747 millones.

El Presupuesto Nacional se dio a conocer un día después de que se revelara el noveno informe del Estado de la Educación, donde se destacó la afectación por el tema de recursos económicos.

“Impacta fuertemente en las políticas que buscan la permanencia de poblaciones vulnerables en el sistema educativo, por ejemplo, mediante incentivos como becas, transporte o el servicio de comedor”, señala el estudio.

Otro dato es que la inversión social en educación por habitante cayó un 6,4% en el período 2017-2021, con un fuerte impacto en los Programas de Equidad, que incluyen becas, transporte y alimentación para que los estudiantes de menos ingresos familiares se mantengan en las aulas.

La falta de recursos, dice el documento, podría tener un impacto en el desarrollo económico y social. Se estima que el 40% de la población estudiantil está en niveles de pobreza, por lo que son los más afectados.

OBSERVE MÁS: Gobierno presenta Presupuesto Nacional para el 2024 por ¢12,63 billones

El ministro de Hacienda justificó que pese a la inversión en educación, los resultados en pruebas internacionales son muy malos. (Archivo/El Observador)

Invertir en docentes

Natalia Tieso, directora de Maple Bear en América Latina, instó a Costa Rica a invertir en la formación de docentes para tener mejores resultados educativos.

Uno de los puntos claves tiene que ver con lograr que haya docentes bilingües lo cual permitiría la enseñanza de este idioma desde edades tempranas, ya sea con actividades diversas como juegos, o bien de análisis para los de mayor edad.

“Hay que hacer un foco en lo que se quiere y tener prioridades, pero el cambio educativo es una estrategia a largo plazo, va más allá de un partido político, esto se habla de 10-20 años y me parece que se requiere un consenso político, una voluntad política más allá de que sea equis partido para mantenerlo, porque sino lo que pasa en nuestros países es que tenemos 4-5 años y luego viene otra gestión y volvemos para atrás, me parece que hay que revalorizar el rol que ocupa la educación para los ciudadanos del futuro y mejorar así la educación en Costa Rica”, puntualizó durante una gira de trabajo que tuvo en nuestro país.

Para Tieso, esta formación es fundamental dado que son los profesores quienes están al frente en el aula y es, a través de estos que se pueden lograr cambios en favor de los educandos, dadas las competencias y habilidades que requerirán en el futuro.

Subrayó que para la educación debe moverse hacia la formación de estudiantes con habilidades relacionadas con pensamiento crítico, liderazgo, creatividad y otras, que serán necesarias en un mundo donde la inteligencia artificial amenaza con arrebatar puestos de trabajo.

“Sabemos que hoy Google tiene muchas respuestas, la inteligencia artificial va a tener muchas respuestas también, lo que no se va a reemplazar nunca tiene que ver con esas competencias y habilidades que nos hacen persona”, puntualizó.

“Antes solíamos decir que hacía un ensayo, escribe o hace una presentación, pero lo mejor es darles una variedad de herramientas para aquellos que sean más creativos puedan explicar lo aprendido a través de una obra de arte, a través de un podcast, una presentación, video, presentación digital, esos son los primeros pasos para hacer una educación hacia el futuro”, agregó Tieso.

Ella consideró que con la inversión en formación de educadores, se puede salir del apagón educativo en el que se metió Costa Rica desde el 2020 por la pandemia y sumado a problemas estructurales, de los que todavía, no ve la luz.

OBSERVE MÁS: Presupuesto para educación en 2023 fue el más bajo en nueve años: informe advierte de acuerdos incumplidos