Paula Ruiz
El Gobierno presentó este viernes a la Asamblea Legislativa un Presupuesto Nacional para ejecutar en el 2024 por ¢12,63 billones. Este monto es 3% mayor al de 2023 que fue por ¢12,26 billones.
Nogui Acosta, ministro de Hacienda, informó que un 38,8% se solventará con deuda y el 61,2% mediante la recaudación de impuestos.
De esta manera, ¢4,9 billones deberán ser “recogidos en el mercado financiero y el reto es más importante porque tenemos tasa de interés, tipos de cambio y condiciones de mercado”, especificó Acosta.
El restante ¢7,7 billones será por la recaudación de impuestos, siendo el de Valor Agregado el más importante, seguido de renta y otros como el de combustible, de este último se estiman ¢575.000 millones para el 2024.
Prácticamente, lo que se recauda con este último tributo mencionado es para financiar el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES), destacó el jerarca.
Con respecto a la regla fiscal, el límite de crecimiento es de 3,53%.
Este Presupuesto incluye a 24 instituciones. El 80% del plan de gastos se gira para el pago de deuda, Ministerio de Educación Pública (MEP), pensiones y Poder Judicial.
“Los costarricenses asignamos a Poder Judicial ¢490.000 millones y uno se pregunta y qué ejercicio hacen de autorización porque cuando oye al Organismo de Investigación Judicial que tiene que darle recursos, no es así. La priorización depende de lo que la Corte decida… ya ahí hay que llamar la atención”, afirmó el jerarca.
Aumento de deuda
El ministro expuso que el pago de deuda aumentó ¢167.000 millones dado que cada cinco años hay vencimientos. Para junio de 2024, hay que desembolsar ¢700.000 millones, advirtió Acosta.
Asimismo, informó que el presupuesto del MEP tiene un crecimiento de ¢74.747 millones.
En contraparte, disminuye el del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). Esto porque se girarán recursos asignados a esta cartera hacia el Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi).
Acosta recordó que para este año hubo una construcción distinta del Presupuesto,, ya que al inicio del ciclo presupuestario que sucedió el 15 de abril se le asignó a cada ministerio el límite de gasto.
Por tal motivo, se tomó la ejecución presupuestaria de los últimos dos años más la proyección del 2023 y se realizó una asignación preliminar.
Por ejemplo, una institución ejecutó 87,5% en 2021; 90% en 2022 y 92,5% para el 2023, se promedió una ejecución del 90% para el 2024.
De esta manera, si una entidad tuvo un presupuesto de ¢20.000 millones, ese 90% significaría ¢18.000 millones para el 2024.
A raíz de esta práctica, se ubicó la disponibilidad de ¢125.000 millones para ser otorgados según las prioridades del Gobierno.
“¿Qué hicimos’ Les dijimos a los ministros: necesitamos que nos den proyectos que vayan a ser financiados con estos 125.000 millones y dependiendo del análisis del Consejo de Gobierno, realizamos la asignación”, explicó Acosta.
De esta manera, se otorgaron recursos para el MEP, institución desde la que presentaron un modelo de alianza público-privada para la construcción de escuelas.
Otras entidades
También, se giraron más recursos al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) para acciones de prevenir ciberataques.
Mientras tanto, al Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) se le otorgarán ¢43.000 millones más de la ejecución del año anterior.
Paulina Ramírez, presidenta de la Comisión de Asuntos Hacendarios y donde se estudiará en primera instancia este plan de gastos, afirmó que se analizará cuidadosamente cada una de las partidas.
Sin embargo, fue clara en que pese a la situación fiscal del país, no permitirán que la disponibilidad de recursos no sea el suficiente para el sector social.
A partir del próximo martes, el foro legislativo está en la obligación de centrarse en esta iniciativa. La fecha límite para que el Plenario someta a votación en segundo debate este plan de gastos es el 29 de noviembre.
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