Redacción El Observador
El país atraviesa por una segunda ola pandémica de la COVID-19 debido a que luego de bajar los niveles de contagio y tener más casos recuperados que activos, hoy se vive una situación inversa, es decir, hay más casos activos que recuperados.
Eso lleva al ministro de Salud, Daniel Salas, a afirmar que, a 3 meses de identificado el primer caso del nuevo Coronavirus en suelo nacional, se está atravesando por una segunda ola pandémica.
“Nosotros es claro que ya atravesamos por la primera ola donde ya empezamos a tener en un momento mayor cantidad de casos recuperados versus casos nuevos y ese estatus ya lo perdimos.
“Tenemos un aumento en la cantidad de casos activos y el aumento es importante, y eso se puede identificar como una segunda ola”, acotó el jerarca de Salud.
Pero además, el Ministro advirtió que por el comportamiento, de alguna manera atípico en esta pandemia, podrían esperarse varias olas más para los meses de agosto, setiembre próximos.
“Hemos tomado acciones bastante contundentes y oportunas, y que ha permitido hacer ese control sostenido de la transmisión y eso nos lleva a un comportamiento un poco irregular, en donde eventualmente pueden haber más olas de lo que normalmente se ha documentado con una pandemia de influenza”, declaró Salas.
Dijo el país tuvo un primer pico de la enfermedad en marzo anterior y luego hubo un descenso. En los últimos días se comenzó a experimentar un nuevo incremento de casos activos, lo cual es hace pensar que es posible le que este pico baje pero vuelva a aumentar en los meses de agosto o setiembre próximos.
En el caso de influenza, explicó, en tiempos de pandemia hay hasta 3 oleadas e incluso puede tenerse una cuarta ola más pequeña.
Eso sí, el Ministro enfatizó que en el caso del SARS COV 2, por lo altamente contagiosa y mortal que es, y la forma como se ha actuado, es previsible que no siga el comportamiento de otras pandemias.
En el siglo pasado hubo tres pandemias de gripe. La de 1918 que fue la más grave se desarrolló en tres oleadas. La primera fue en primavera de 1918, luego otra en otoño de ese mismo año y finalmente en el invierno de 1919.
La segunda ola del otoño fue la más grave, donde ocurrieron el 64 % del total de los fallecimientos.
