El Tribunal Penal de Cartago calificó como homicidio simple el asesinato de Allison Bonilla. Por eso sentenció a Nelson Sánchez Ureña, alias Sukia, a 18 años de cárcel, pena máxima para ese tipo de delito.
El Ministerio Público y la parte querellante solicitaron 35 años por un homicidio calificado. Ambas partes tomaron en cuenta que el hombre golpeó, amarró y lanzó a la muchacha por un precipicio de 400 metros.
Según los jueces que llevaron el caso (Jenny Almendaris, Magaly Orue y Franklin Ramírez), Sukia no planeó el homicidio. Es decir, no hubo alevosía y, por ende, no se definió como homicidio calificado.
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“Dentro de las conclusiones del Ministerio Público y la querella privada se solicitó que se agravara la conducta por alevosía.
“El Tribunal no comparte esta posición porque no se reúnen estos elementos para que se presentara la conducta de su parte. No se llenan las características de alevosía”, dijo el juez Ramírez durante la explicación del por tanto.
“No había forma que usted supiera (le dijo a Sánchez Ureña) que Allison iba a pasar el 4 de marzo a pie por ese lugar. Es decir, que no se comprobó que usted organizara sus ideas, o las preordenaba para acabar con la vida de Allison”, añadió.
Eso hizo que se descartara el hecho como un homicidio calificado.
Además, consideraron que no se demostró que se cometió otro delito, en este caso violación, del cual fue absuelto y por ende al lanzarla al basurero clandestino no pretendía ocultar que cometió otro delito.
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Contradicciones
A pesar de esas circunstancias descritas, el Tribunal si consideró que la muerte de Allison fue fría, con extrema crueldad y mucha violencia. Y que Sánchez Ureña la lanzó al botadero de basura clandestino para ocultar la muerte.
“No solo acaba con la vida de Allison, sino que al lanzarla a ese lugar se asegura de que no va a ser encontrado el cuerpo, como ocurrió, lo que ocasionó un sufrimiento a doña Yendry y a toda la familia”, mencionó el juez.
“Usted acabó con la vida de una joven que estaba empezando a vivir”, siguió con el relato.
El Tribunal lo encontró responsable del hecho asegurando que se aprovechó del conocimiento que tenía del lugar, así como del acercamiento amistoso que tuvo con la joven días antes de los hechos.
“Sabía que era un basurero y esa comparación resulta odiosa. Usted lanza a Allison como un deshecho”, dijo el juez.
Apelaciones
El abogado de la familia de Allison, Rodrigo Araya, aseguró que se apelará la sentencia e irá a las siguientes instancias en busca de que logre la pena de 35 años que se solicitó.
Por su parte, el Ministerio Público esperará analizar la sentencia integral en firme que se dará a conocer la próxima semana. Esto para determinar si presenta un recurso de apelación.
“En ese sentido, este despacho esperará la sentencia integral, para analizarla y determinar si procede apelar la resolución o no”, indicó la Fiscalía.