Tomás Gómez
El Congreso de Estados Unidos arrancó su sesión en la que finalmente oficializará los resultados de las elecciones presidenciales de noviembre y como era de esperar la polémica arrancó desde el primer momento.
La sesión arrancó con un regaño de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a un grupo de senadores republicanos que ingresaron a la sala pese a las restricciones de aforo.
Arrancada la sesión, se comenzaron a recontar los estados.
Los votos se revisan en orden alfabético y luego de aprobar Alabama y Alaska -afines a Donald Trump- se pasó a Arizona, donde ganó Joe Biden.
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En ese momento los republicanos alegaron problemas y el avance quedó interrumpido.
Según su queja, el certificado no se presentó de manera regular. El argumento deberá ser analizado durante dos horas tanto por el Senado como por la Cámara antes de tomar una decisión.
Los congresistas afines a Trump no tienen los votos para interrumpir el proceso, por lo que la técnica solo atrasará la sesión.
Mike Pence como presidente del Senado y Nancy Pelosi como líder de la Cámara de Representantes presiden la sesión conjunta donde Joe Biden será ratificado finalmente como presidente de Estados Unidos (AFP)
Pence frena a su jefe Trump
Uno de los puntos que más espectativas generaba para este miércoles era el rol que tendría el vicepresidente Mike Pence.
Por ley, Pence es quien preside el Senado y hacia él, Trump publicó varios twits pidiéndole su intervención.
“Los estados quieren que se corrijan los votos, que saben que están basados en irregularidades y fraude, además de un proceso corrupto que no recibió apoyo legislativo. Todo lo que Mike Pence tiene que hacer es enviar de vuelta a los estados y GANAREMOS. Hazlo, Mike, ¡es el momento de la valentía extrema!”, escribió el presidente el martes.
Precisamente, este miércoles, durante un mitín con miles de simpatizantes, Trump reiteró su llamado al vicepresidente.
“Si Mike Pence hace lo correcto, ganamos las elecciones”, dijo Trump a sus partidarios reunidos afuera de la Casa Blanca. “Tiene el derecho absoluto de hacerlo”.
“Mike Pence tendrá que ayudarnos, y si no lo hace, será un día triste para nuestro país”, añadió Trump, tildando de “débiles” a los legisladores republicanos que planean certificar a Biden.
Una vez arrancada la sesión, Pence recurrió también a Twitter para descartar cualquier intervención.
Según dijo, se debe respetar la decisión de los estadounidenses y revisar evidencias en caso de existir.
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“Hace cuatro años, rodeado de mi familia, hice un juramento de apoyar y defender la Constitución, que terminó con las palabras “Dios me ayude”. Hoy quiero asegurarle al pueblo estadounidense que mantendré el juramento que le hice al Dios Todopoderoso”, sentenció.
“Cumpliré con mi deber de asegurarme de que abramos los certificados de los electores de varios estados, escuchemos objeciones y contamos los votos del Colegio Electoral de una manera consistente con nuestra Constitución, leyes e historia”, concluyó.
— Mike Pence (@Mike_Pence) January 6, 2021
